Provoca consumo de cocaína infarto al corazón en jóvenes

Notimex.- El cardiólogo Luis Alcocer, del Hospital General de México, advirtió que el consumo de cocaína representa para los jóvenes un alto riesgo de sufrir un infarto al miocardio y morir súbitamente, sobre todo en menores de 25 años.

Entrevistado en el marco del 27 Congreso Mexicano de Cardiología, que concluye este jueves, precisó que el riesgo se tiene desde la primera vez que se consume cocaína, ya que se puede sufrir un infarto que cueste la vida.

“El punto es que la población sepa que el consumo de cocaína tiene este problema. La incidencia de infartos en la primera exposición es alta, y es alarmante porque muchos chicos por tener la experiencia ponen en grave riesgo su vida, y aunque puede estar relacionado con la cantidad de dosis en un consumo habitual también se presenta el problema”, comentó.

Indicó que muchos de estos jóvenes mueren antes de llegar al hospital y que en los últimos años la presencia de jóvenes menores de 25 años de edad con infartos por el consumo de cocaína ha aumentado en las salas de emergencia de los hospitales tanto públicos como privados.

El cardiólogo explicó que es importante que el joven tenga claro que si viene de una fiesta y siente dolor en el pecho que intuya que puede ser un infarto, pues es indispensable la atención en la primera hora que ocurre el problema.

Además el médico tratante no debe descartar la posibilidad de un infarto por ser joven y no presentar otros factores de riesgo como aterosclerosis, obesidad o diabetes, dijo.

“Si siente dolor en el pecho y viene de una fiesta y consumió cocaína que tenga claro que puede ser un infarto, y toda persona joven con infarto al miocardio y que no tienen factores de riesgo el médico debe preguntar y atenderlo”, comentó.

Luis Alcocer, quien también ejerce la medicina privada en el Grupo Angeles, informó que no existen estadísticas ni número que revelen en cuánto ha aumentado la incidencia de jóvenes que sufren un infarto por el consumo de cocaína, pero aseguró que sí ha sido visible este aumento.

Destacó que no hay estadísticas claras porque esta situación tiene varios puntos de vista desde el tema epidemiológico.

“Cuando uno ve a un chico con menos de 40 años con un infarto, con muy pocos factores de riesgo, debe uno sospechar que ha sido por cocaína. El problema es que uno lo pregunta y el paciente lo niega sobre todo si está con sus familiares”, explicó.

Indicó que esta situación se empezó a presentar en México a finales de los 90 y en este siglo, pues el consumo de cocaína ha sido muy fuerte.

“No podemos decir cuántos porque no hay números estadísticos. El hecho es que existe y que hay que pensar en él”, advirtió.

Explicó que la cocaína es un gran estimulante y puede tener respuesta en el sistema energético muy importante; esto produce un infarto por el aumento exagerado de la necesidad de que el corazón bombeé más fuerte, porque no puede surtir unas coronarias que violentamente demandan mucho más sangre.

“Se ha hablado también de la posibilidad de espasmos en este tipo de pacientes, pero en realidad son por mezclas de cocaína, bebidas alcohólicas y bebidas energizantes, que también hacen mucho daño”, expresó.

“Ahora es muy frecuente la toma de bebidas energizantes que por ellas mismas pueden provocar también un infarto, arritmia severa o las dos cosas”, añadió.