Magos Herrera unta a México de azul

Notimex. Las orquídeas murmuran en los floreros: inscriben su olor en las estaciones: muerden los afanes del tiempo: se marchitan, siguen bordando los cruzamientos de las codicias. La canción se abalanza sobre los restos para que la tristeza festiva nazca. Un bolero amortigua la dolencia. / Una tonada blues nos arrebata el desasosiego, caminamos por las sendas del prado. Bajo la maravilla del país que tenemos en los ojos todo puede inspirar: el deseo, acopio de deudas con la luz: el cristal, testigo del ardor. La distancia se asoma en el crespúsculo. / La distancia conversa con los olvidos. / La distancia abre ventanas. / La distancia nos pone frente a frente al azogue. / La distancia proclama la vendimia. / La distancia avizora las ausencias. / óAh, el azul con su cisura! óAy, el azul con su añoranza! “Cuando yo sentí de cerca tu mirar / de color de cielo de color de mar / mi paisaje triste se vistió de azul / con ese azul que tienes tú”, dice el poeta: Magos Herrera lo musita como un “listón azul, azul de amanecer”: una trompeta cede un retazo de melancolía bakeriana, y México entero se baña todo de azul en un suceso musical que se llama Magos Herrera “México Azul” (2010).

La cantante de jazz mexicana pone en nuestras manos una producción de complicidades en septeto ponderable: Luis Perdomo (piano), venezolano de la escuela de Jamal y Taylor. Colaborador de Patitucci, Barreto, Jane Bunnett, Ravi Coltrane…; Adam Rogers (guitarras acústica y eléctrica), etadounidense que ha trabajado con Michael Brecker, Orquesta de Mingus, John Patitucci Trío, Chris Potter Underground… Guitarrista de lenguaje versátil, reconocido trabajo en los escenarios del jazz contemporáneo; Tim Hagans (trompeta), heredero de Miles Davis y Chet Baker. Fuerza expresiva de un lirismo cool conmovedor. Mejor Trompeta de Jazz en la 30 Encuesta Anual de Tribuna da Impresa, Brasil. Colaborador de Dave Liebman, Randy Brecker, Joe Lovano…; Alex Kautz (batería), nacido en Sao Paulo, apasionado del jazz, amante del “Music World”. Colaborador de Robert Rodríguez, Helio Alves… Precisión rítmica de elegante sujeción; Rogerio Boccato (percusiones), miembro de Jazz Orquesta Sinfónica de Sao Paulo, colaborador de Patitucci, Kenny Garrett, Danilo Pérez… Experto en ritmos tradicionales brasileño; Jonh Patitucci (contrabajo), neoyorquiino de origen italiano, líder de jazz fusion y música brasileña. Bajista de Elektric Band y Akoustic Band de Chick Corea. Virtuoso del bajo eléctrico y del contrabajo. Arquitecto de una sonoridad posbebop de atractiva sofisticación armónica. óVaya conjunto!

Álvaro Carrillo (“Luz de Luna”, “Seguiré mi viaje”, “Que sea para mí”), Agustín Lara (“Noche criolla”, “Azul”, “Lamento jarocho”), Osvaldo Farrés (“Tres palabras”), Isolina Carrillo (“Dos gardenias”), Pedro Flores (“Obsesión”), Eloy Blanco/Álvarez (“Angelitos negros”) y Magos Herrera (“Voz antigua”). Arreglos de Tim Ries (sax acompañante de Rolling Stones), Alejandro Mercado, Alex Kautz y Magos Herrera. El bolero cubano, portorriqueño y venezolano en contrapunto con Carrillo y Lara. “Después de los años, y bajo las exigencias de interpretarlo, Álvaro Carrillo se ha convertido en uno de mis compositores favoritos. Lara está presente cada vez que suscribo una canción mexicana”, declara Magos.

Álbum que prosigue la línea de “Distancia” (2009) en la consonancia de una jazzista preocupada por un timbre orquestal minimalista, íntimo, cool, neoclásico, esta vez con un “brass” (trompeta) de pronunciaciones davisianas en bisbiseos que rinden homenaje a Chet Baker. “Me gusta el sonido de la trompeta, se aviene bien con mi voz; los retumbos de Miles Davis en Tim me parecen que se cruzan bien con el bolero”. Piano en bordes “jamalianos”, guitarras bordando presunciones melódicas y embates percutivos de puntuales tabaleos. Patitucci sobrepasa el “walking bass” con inquietas pulsaciones bop de técnica impecable (ojo a la apertura de “Luz de Luna”).

Fraseo de tesitura cabalgante: los espacios de alturas en las inflexiones de Magos peregrinan por cautivadoras cadencias anímicas. Intimidad de una dicción que corteja, “scateo” de apacible swing: voz intensa y seductora. Estamos en presencia de un cuaderno musical histórico que inaugura un nuevo capítulo en el jazz mexicano. “México Azul”: las orquídeas siguen susurrando. Magos Herrera en los esplendores de su carrera.