Entrenadores apoyan y asesoran a los poblanos que buscan el triunfo en cada pelea

Han conformado un gran equipo y los resultados saltan a la vista en cada una de las peleas. Es el equipo de entrenadores y auxiliares de la selección poblana de boxeo que dentro de la Olimpiada Nacional 2012 colaboran en el intercambio de puntos de vista de acuerdo a los rivales que los poblanos tienen enfrente arriba del cuadrilátero.

Antonio Rico Hernández es el encargado de llevar las riendas de los pugilistas, pero además de los entrenadores que desde la esquina apoyan y asesoran a los poblanos que buscan el triunfo en cada pelea.

“Nos apoyamos entre todos, en las peleas nos dividimos en los rings, vemos contra quiénes van los chavos, nos decimos cómo pelean, es un trabajo en equipo. Nos coordinamos bien, nos ponemos de acuerdo, cada quien tiene un trabajo, una tarea y sobre eso vamos trabajando de acuerdo a la preparación”, explica el entrenador de la selección.

El cuerpo de entrenadores y auxiliares está integrado por Wilfrido Peralta Tzili, Dino Tlatelpa y Jorge Sánchez, quienes exponen en cada combate los conocimientos adquiridos y la experiencia de años para tratar de llevar por el buen camino a los jóvenes pugilistas.

Se convierten pues en los guías de los boxeadores que también, con el físico y la técnica tratan de llegar al triunfo y dar un paso más hacia las instancias finales. Y entra en escena uno de los aspectos fundamentales en el desempeño de los deportistas, la motivación.

“Y una persona motivada siempre va a trabajar mejor, es así también con los entrenadores, también trabajamos mucho mejor. Platicamos entre nosotros, nuestro grupo es como una mesa, si falta una pata se cae, tenemos que estar unidos para bien del equipo”, agrega Wilfrido Peralta.

Por lo menos, Rico Hernández y Peralta Tzili han acompañado a la selección de Puebla desde Monterrey 2008, para continuar por Mexicali 2009, Guadalajara 2012, Mérida 2011 y actualmente en Irapuato 2012, es decir, han colaborado en equipo junto a otros entrenadores en cinco Olimpiadas Nacionales.

Además de seis Campeonatos Nacionales de Primera fuerza, “donde siempre hemos tratado de coordinarnos bien con tareas específicas”, concluye Antonio Rico Hernández.