Resaltan obra de Gómez Carrillo, figura cimera de literatura de CA

Notimex. La obra de Enrique Gómez Carrillo (1873-1927), gloria de la literatura centroamericana y el autor guatemalteco más prolífico, fue recordado en su país en un encuentro internacional de académicos, seguidores, universitarios y lectores.

La vida y obra del cronista “exquisito” fue estudiada durante dos días en el Segundo Congreso Internacional. Reencuentro con Enrique Gómez Carrillo, patrocinado por la privada Universidad Rafael Landívar, uno de los mayores centros de estudios superiores de Guatemala.

Autor de obras como “El Japón heroico y galante”, “Bohemia sentimental”, “El evangelio del amor”, el escritor, periodista, crítico literario y diplomático fue un prolífico autor, identificado con el movimiento modernista.

La figura de Gómez Carrillo “es fundamental en la literatura de Guatemala y Centroamérica”, dijo en entrevista con Notimex el escritor guatemalteco Francisco Alejandro Méndez, uno de los conferencistas en el Congreso.

Según el también catedrático, Gómez Carrillo fue un extraordinario novelista y excelente ensayista y crítico literario, pero es más reconocido por sus crónicas en las que sobresalen los retratos de viajes y de la vida europea de entre 1890 y 1920.

“Autodidacta, secretario del poeta nicaraguense Rubén Darío, Gómez Carrillo comenzó a escribir muy joven. Salió de Guatemala, gracias a una beca presidencial para estudiar en España”, y se afincó en París, donde además de su quehacer literario se desempeño como corresponsal de revistas y periódicos de Iberoamérica

Luego de que a los 19 años salió a la luz su primer libro, una antología de poetas franceses, Gómez Carrillo se convirtió “en el autor guatemalteco que más libros ha publicado, con 98 obras”, destacó Méndez.

El académico de literatura aseveró que Gómez Carrillo “figura entre los tres más grandes escritores de Guatemala y Centroamérica”, pero lamentó que su obra se estudie y se conozca más en el extranjero, que en su propio país.

El autor “fue una especie de paladín de los modernistas”, y “por sus crónicas exquisitas, en las que reflejaba su dominio de temas como arte, historia, arquitectura, política, costumbres, se erigió en el Príncipe de los Cronistas”, dijo Méndez.

Estimó que la obra de dicho literato “está vigente” y no ha perdido frescura, ni actualidad, en especial sus impresiones de la vida cotidiana de la época”.

“Hizo obras monumentales, por su conocimiento y manejo de temas, de sus viajes a la URSS, Grecia, Marruecos”, y citó como ejemplo de su vigencia, que el libro “El Japón heroico y galante” todavía se lee para conocer aspectos de la vida y de la cultura japonesa.

Como parte de los dos días de actividades del “Reencuentro con Gómez Carrillo”, la editorial Alfaguarapresentó el libro “Tres novelas inmorales”, publicada por primera vez en 1919 en Madrid.

En el sello Alfaguara “hemos querido recuperar obras de autores fundamentales y que por una u otra razón” no se difunden, como es el caso de algunos textos de Gómez Carrillo, dijo a Notimex la gerente de Prisa Ediciones, María del Carmen Deola.

La especialista española explicó que la novedad de la edición publicada en Guatemala de “Tres novelas inmorales” estriba en que los tres textos por primera vez se juntan en un solo volumen, luego de que en su tiempo aparecieron por separado.

“Vimos como una buena excusa el Segundo Congreso Internacional sobre Gómez Carrillo para presentar la obra”, señaló la ejecutiva del grupo editorial que difunde a autores como el recién fallecido Carlos Fuentes, y los Nobel de Literatura José Saramago (1998) y Mario Vargas Llosa (2010).

El académico y literato argentino afincado en Guatemala, Jorge Carro, anfitrión del Reencuentro y presidente de la Asociación Amigos de Enrique Gómez Carrillo, dijo a Notimex que el autor “es uno de los mayores escritores de Hispanoamérica”.

“En tiempos en que no existían los extraordinarios medios de comunicación actuales, las crónicas y despachos de su trabajo de corresponsal llegaba a más de cinco millones de lectores”, dijo Carro, director de la Biblioteca de la Universidad Rafael Landívar, que con 280 mil ejemplares es el recinto más surtido en Centroamérica.