Los magos de Oriente son personajes citados en la Biblia, en el Nuevo Testamento. Es poco lo que realmente se sabe de ellos: se ignora cuántos eran y de qué tierras proceden. En la escritura solo es sabido de ellos lo que cuenta el Evangelio de Mateo Nacido “Jesús en Belén de Judá en los días del rey Herodes, llegaron del Oriente a Jerusalén unos magos diciendo: ¿Dónde está el rey de los judíos que acaba de nacer? Y al entrar en la casa, vieron al niño con su madre María, y postrándose, lo adoraron; y abriendo sus tesoros, le ofrecieron presentes: oro, incienso y mirra.”
La tradición cuenta que vinieron de Oriente, en número de tres, que iban guiándose por una estrella que les condujo hasta Belén. Allí buscaron al Niño Jesús recién nacido y le adoraron, ofreciendo oro que significa: presente conferido a los reyes, incienso significa: empleado en el culto en los altares de Dios y mirra es un compuesto embalsamador para los muertos. Según en la Biblia se dice que antes de llegar, en la ciudad de Jerusalén, encontraron al gobernador Herodes el Grande, quien astutamente les conminó a que, de regreso, hablaran con él para darle noticia del sitio exacto donde se encontraba dicho niño, para poder ir él también a adorarle. Pero en realidad, lo que quería era darle muerte, por eso ordenó la matanza de los inocentes.
La historia sigue contando cómo un ángel se apareció a los tres reyes magos y les advirtió del peligro que corría Jesús si ellos obedecían el deseo de Herodes. Así pues los Reyes Magos no volvieron por el mismo sitio.
Parece ser que por el hecho de que el relato evangélico indicara que trajeron tres dones que fueron el oro, el incienso y mirra. No obstante en algún momento las distintas tradiciones han señalado que eran dos, cuatro, siete y hasta doce.
Otra leyenda cuenta que después de la Resurrección de Jesús, el apóstol Tomás los halló en Saba de la India, que fueron bautizados y que se les consagró obispos; después fueron martirizados en el año 70 y fueron depositados en el mismo sarcófago. Los restos fueron llevados a Constantinopla por Santa Elena. Posteriormente, Federico I Barbarroja, en el siglo XII, las trasladó a Colonia, donde hoy reposan sus cenizas con las coronas que supuestamente llevaron durante su existencia. Actualmente se dice en la catedral de Colonia, se veneran los supuestos restos de los Reyes Magos en una urna dorada colocada en el altar mayo.
Su festejo
Con el pasar de los años, en diferentes países de tradición católica, se adoptó la costumbre de celebrar al mismo tiempo el día de la Epifanía que cae el 6 de enero, con la festividad de los Reyes Magos, así mismo la manifestación de Jesús al mundo no judío con la fiesta de estos personajes que representaban justamente ese mundo de gentiles. Poco a poco se fue olvidando el significado verdadero de la palabra epifanía y la convirtió en un sinónimo de adoración de los Magos.
En España, Argentina, México, Chile, Perú, Colombia, Paraguay, Venezuela, Ecuador y otros países de habla hispánica existe la costumbre de poner regalos a los niños y a los mayores, esto es en la noche cuando duermen del día 5 de enero para que el 6 los niños y adultos reciban sus obsequios. En España la costumbre era poner los regalos en el balcón, sobre los zapatos que previamente se habían colocado allí. A veces se dejaban allí mismo dulces para obsequiar a los dignos visitantes y paja para los camellos, que se supone era o es el medio de transporte.
Es impresionante como el día 6 de enero ya es una fiesta para todo el mundo y el festejo hacia los Reyes Magos, es el momento en que los niños disfrutan de sus obsequios, la fiesta se va aumentando cada día más que van cambiando con el tiempo, en las escuelas de diferentes niveles hacen representaciones teatrales y donde se concluyen con bailes de máscaras. Es así como se le da vida al Día de los Santos Reyes Magos.
No Comments
Comments for ¿Cómo surgen los Santos Reyes Magos? are now closed.