Mejora salud del subcampeón olímpico de México Noé Hernández

Prensa Latina.- La salud del mexicano subcampeón olímpico de Sydney, Noé Hernández, mejora, aunque permanece delicado, ingirió alimentos y dio algunos pasos lo cual redujo el peligro de una neumonía, informaron hoy sus médicos.

Tras recibir un impacto de bala en la cabeza, el medallista de plata en la marcha de 20 kilómetros de los Juegos Olímpicos 2000, tiene una apreciable mejoría, se le retiraron las sondas respiratorias, fue instalado en terapia intermedia en la Clínica de Neurotraumatología en Bosques de Aragón, y los especialistas esperan que abandone el centro en nueve días.

En esa unidad sanitaria fue sometido a varias cirugías por balazo recibido el sábado en un bar del Estado de México, que entró por el cerebro y salió por el ojo izquierdo.

El titular de la Asociación de Medallistas Olímpicos, Daniel Aceves, tras visitar al exatleta en el hospital, comentó a la prensa que lo vió de buen ánimo, aunque estaba un poco aturdido y hasta ese momento desconocía haber perdido el ojo.

Aceves presentó este miércoles una iniciativa ante la Comisión Nacional de Cultura Física Y Deporte (Conade) para que los medallistas olímpicos cuenten con seguro social o una póliza de gastos mayores.

Comentó al respecto que la esposa de Hernández se quejó por el desamparo en que viven las familias de glorias del deporte mexicano, y le contó que estuvieron peregrinando dos horas y, al final, en un lugar le cobraron 890 mil pesos (más de 69 mil 500 dólares) por una atención que no lo ameritaba.

Los gastos por los cuidados al deportista la cubren los gobiernos de Chimalhuacán y del Estado de México.

El exatleta, quien es secretario de deporte del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en ese territorio, fue baleado en la cabeza cuando se encontraba en el bar Reyna de los Reyes, ubicado en la autopista México-Texcoco.

Un grupo armado arribó a ese lugar y abrió fuego contra los presentes, con un saldo de dos muertos de 30 y 55 años, y dos heridos de gravedad.

Los atacantes usaron armas de varios calibres y hasta ahora se desconocen autores y móviles del sangriento hecho.