Notimex.- Aunque los mexicanos afirman estar conscientes de que un embarazo puede truncar las expectativas de vida de los adolescentes, contradictoriamente la mayoría también cree que lo mejor es que los padres hablen con sus hijos sobre sexualidad a partir de los 18 años.
De acuerdo con la encuesta telefónica de Gabinete de Comunicación Estratégica (GCE), 61.2 por ciento de las personas considera que hablar del embarazo adolescente se debe hacer a partir de los 18 años; 15.9 por ciento piensa que de los 16 a los 18 y 19.6 por ciento de los 14 a los 15.
Del universo de encuestados, 66 de cada cien mujeres dicen que hay que hablar del embarazo después de los 18, una posición que comparten 55 hombres.
Aunque la Organización de las Naciones Unidas alertó que el embarazo adolescente es uno de los principales problemas demográficos en la actualidad, apenas a cuatro de cada 100 les preocupa que sus hijos puedan ser padres y madres en la adolescencia.
Según GCE, a 52 de cada cien padres y madres les preocupa más que los hijos puedan volverse adictos a las drogas o al alcohol; a 20 les preocupa que puedan contagiarse de alguna enfermedad de transmisión sexual y a 10 de cada 100 les preocupa la deserción escolar.
Pero la problemática es más grave de lo que los padres piensan, pues de acuerdo con la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2012, 23 por ciento de los jóvenes de entre 12 y 19 años han iniciado ya su vida sexual; de esa cifra, 51.9 por ciento de las mujeres dijeron haber estado embarazadas alguna vez y 10 por ciento lo estaba en ese momento.
De acuerdo con la encuesta de opinión de GCE/Kaleydoscopio, 40.8 por ciento dice que la falta de atención de los padres es la principal causa de los embarazos adolescentes; 24.7 los atribuye a la falta de información y educación sexual y 16 por ciento a la pérdida de valores.
El trabajo refiere que 61.2 por ciento sostiene que los muchachos están listos para ser padres después de los 18 años y 59.6 por ciento piensa que un embarazo ‘arruina la vida de los adolescentes’.
Para 35 por ciento de las personas, los menores de edad pueden ser padres sin problemas, y 14.4 por ciento piensa que de los 19 a 21; 9.3 por ciento a partir de los 30 años y 5.3 por ciento de los entrevistados dijo que los muchachos de 16 a 18.
El trabajo de GCE también señala que seis de cada 10 mexicanos piensa que ‘el embarazo de adolescentes es una bomba social, un problema que les arruina la vida’.
En ese sentido, más de 44 de cada cien entrevistados cree que el bebé es el más afectado cuando los adolescentes se embarazan, pero 31 ven con preocupación la situación de las jóvenes mujeres.
Más de la mitad de los entrevistados opinó que acercar a los muchachos a la religión es una buena solución para disminuir los embarazos entre adolescentes, aunque 43.5 por ciento piensa que no es la salida correcta.
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