Veracruzanos esperan a turistas durante el “puente”

Notimex.- Veracruz. Con menos vientos del norte que sacudieron los días recientes este lugar histórico y a la espera de que se incremente el turismo, los comerciantes del puerto de Veracruz están con el mejor de los ánimos para recibir a los paseantes durante el “puente revolucionario”.

En la zona de Los Portales del zócalo, aún con pocos comensales en los restaurantes, los músicos buscan el sustento y resuenan sus instrumentos, con lo que recrean un juego de sonidos que esparce el viento, en el que a veces predomina la marimba, en otras los tríos norteños y, por allá, hasta el otro lado, cerca de la Catedral, un saxofón.

Luego de interpretar en su sax la melodía tradicional “Veracruz”, Juan Palafox Hernandez, cuenta que tiene nueve años de vivir en el puerto y que ahorita, que no hay mucho trabajo, se dedica a lo que llaman “charolear”.

Con su pañuelo amarillo en la cabeza, playera azul y su sax entre las manos, comenta que es “músico callejero”, porque toca en torterías, taquerías, cafés, cocinas económicas y otros comercios, pero que también ameniza eventos y lleva serenatas.

El músico del puerto refiere que en el estado en general están tranquilos, aunque dice que nunca falta quien dice: me robaron, pues la inseguridad nunca se va a quitar, a veces están los niveles elevados, a veces bajos, pero en general hoy está tranquilo el estado.

Siempre con su sonrisa en el rostro, dice que con la “tocada” generalmente sale para los gastos, cuestión de que la gente “nos regale una propina”, y agrega: “ya viene la temporada alta y estamos de mejor ánimo, siempre y cuando lo permita Dios y el clima”.

A un lado del tololoche, el intérprete de canciones norteñas, Ramiro Robles, cuenta que en el puerto los 365 días del año hay turistas, ahora hay poquitos, pero coincide en que ya viene la temporada alta y que a partir de este viernes espera que lleguen muchos paseantes.

También los hoteleros esperan ganancias, pues con el “puente revolucionario” suben los precios hasta 50 por ciento a partir de este 15 de noviembre, y si este jueves un cuarto estándar costaba 580 pesos, el viernes del día siguiente sube a 850 pesos, por ser de temporada alta.

En uno de los puestos de artesanías, se encuentran calaveritas pintadas en rojo y negro, de blanco y negro, además de las multicolores, así como ranas y lagartijas coloridas, en verde claro, todas laqueadas.

También hay en el puesto los alhajeros en cajita o en cruz, en donde el comerciante José Luis Jiménez cuenta que él las vende a 35 o 40 pesos, cinco pesos más que los otros, porque están mejor terminadas, por laca que les pone.

Don José Luis dice que esas artesanías las traen del estado de Guerrero, de donde es su esposa, y que se vende junto con la tradicional del puerto, que son los collares elaborados de coco, las conchas, caracoles y las estrellas de mar.

En otros puestos, dicen que traen artesanía del estado de Chiapas, como blusas, vestidos y otras prendas, pero la verdad son de Guatemala, refiere el comerciante veracruzano.

Entre las comerciantes que han tenido pocas ventas, doña Conchita, originaria del estado de Oaxaca, dice que hacía aire muy fuerte en el puerto y que pocos paseantes salieron y no había quien les comprara, pero “ojalá que se venda en el puente”.

Con su carga de separadores de libros y palillos para picar, elaborados en madera con figuras de animales de colores, como gatos morados, patos verdes claros y otras aves, dice que viene de Oaxaca a vender y que después del puente del 18 de noviembre, se regresa a su estado, como cada 15 días, que va y regresa.

Por las noches, se iluminan varias edificaciones, entre ellos el Palacio Municipal, el de Administración Portuaria y la Catedral, donde hay misa, mientras está listo el Castillo de San Juan de Ulúa, donde este viernes el gobernador Javier Duarte dará su mensaje tras la presentación del Tercer Informe de Gobierno.

Por allá están los soneros, los mariachis y en otra cuadra bailan la bamba, mientras los comerciantes de nieves llaman a los gueros y gueras a refrescarse con una nieve de limón, de cacahuate, de piña y de muchas otras, en un puerto donde mejora el clima y esperan que también las ventas.