Notimex.- En su primer proyecto cinematográfico, “El Crimen del Cácaro Gumaro”, Andrés Bustamante reconoce que la libertad, independencia y satisfacciones que tuvo durante el proceso y marcan una evolución en su carrera y una nueva dirección, hacia la que le gustaría continuar.
“Originalmente yo no iba a actuar en la película” afirmó el actor en entrevista con Notimex, pero luego de trabajar en el guión junto con Emilio Portes y Armando Vega-Gil, “poco a poco se fue perfilando la idea de que yo interpretara al presidente municipal de la historia”.
“El personaje de Don Cuino Meléndez, se fue cocinando, cada vez que hacíamos las lecturas del guión, le fui poniendo la voz y en una comida memorable ahora para mi, el propio Portes, que dirige el filme y el productor Daniel Birman, me dijeron que no se imaginaban a nadie más para ese papel”, dijo Bustamante.
Con el ingenio y sencillez que le caracterizan añadió: “Yo como novia de Güepez (nombre del pueblo imaginario y emblemático en que se desarrolla la historia) me tardé en darles el sí”.
Entonces, se inició un proceso de definición plena del personaje. Por un lado para que no se perdiera, con la caracterización “para bien o para mal”, su propio rostro y por otro para darle a Don Cuino personalidad y sabor.
“Queríamos que fuera como un político pasadón de moda, con patillas como del sexenio de López Portillo, lentes de esos que te permiten echar una jeta y no se dan cuenta, tipo Fidel Velázquez, elegante, bien vestido y con el bigote que se ve que lo trae pintado”.
La película integra en el elenco a Andrés Bustamante, Ana de la Reguera, Alejandro Calva, Carlos Corona, Jesús Ochoa, Armando Vega-Gil y Oscar Iván González, y muestra constantemente cameos (pequeñas participaciones que son joyas de artistas reconocidos y famosos, como lo explicó el propio actor), y “que son en realidad parodias de los propios artistas”.
“Trabajar con Ana de la Reguera resultó sensacional. Desde que empezamos a escribir su personaje que se llama Claudianita, imaginamos que sería padre que lo hiciera ella parodiándose a sí misma y felizmente aceptó. En la historia su personaje es una como manzana de la discordia, pero en el trabajo diario era la manzana de la concordia”
Andrés Bustamante refiere emocionado que “hay una parte de la cinta en la que Ana, que es bellísima y súper talentosa, pierde el estilo durísimo por algo que le sucede y eso fue sugerencia de ella misma. Nos pareció padrísimo que le entrara a la locura de la película y que contra cualquier canon estético, ella aportara mucho”.
A lo largo del filme, lleno de parodia, acción, y efectos, van apareciendo y sorprendiéndonos Eduardo Manzano “El Polivoz”, Javier López “Chabelo”, Carmen Salinas, María Rojo, Kate del Castillo, Jorge Rivero, Karla Souza, Víctor Trujillo, Jose´María Torre – Hütt, Freddy y Germán Ortega, Alberto rojas “El Caballo” Alfonso Zayas, Jis y Trino Camacho y hasta el crítico de cine Silvestre López Portillo.
Reunir este elenco “impresionante” se debió a la producción “me pareció increíble que todos estuvieran dispuestos a parodiarse a sí mismos. Que salga Kate del Castillo , por ejemplo, parodiándose a sí misma, sobre una película que fue exitosa, está a todo dar, eso habla muy bien de todos los que salen en la cinta”
Hay que reconocer que integrar a tal elenco es sin duda también un reconocimiento a la trayectoria de Andrés Bustamante, actor, escritor y productor que por méritos propios ha alcanzado la admiración de millones de mexicanos.
Sobre el diseño de producción, Andrés Bustamante elogió el trabajo de Roberto Bonelli. “era muy importante que tuviera ese bordado fino cada cuadro, yo incluso hago el comentario de que hay que verla tres veces, inclusive para los que la hicimos de repente se nos pasa algo, porque estás viendo una cosa y están sucediendo otras cosas más que hay que ver”
“Atrás, en una escena, puede salir un poster y en vez de Mecánica Nacional (referencia a la exitosa comedia de 1971) dice Mi canica nacional, por ejemplo, pero son miles de detalles, se mandaron hacer billetes de ciudad Güepez, placas de coches, portadas de los videos piratas, y cientos de detalles más que hacen referencia a otro tanto de cosas y situaciones que existen o existieron”.
La filmación se llevó a cabo en Salvatierra, Guanajuato, donde “nos trataron a todo mecate”, pero también en foros y locaciones de la ciudad de México. Entre los retos que enfrentó la producción fue el tener que traer a cerca de 150 personas (extras) de Salvatierra a vivir a México por unas semanas para darle continuidad a las escenas.
Cuando Andrés Bustamante vió la película terminada “superó las expectativas que tenía, y luego te da una emoción que es como una emoción nostálgica, que se haya logrado ese ambiente, que suave que se hayan hecho bien las cosas, con cariño, con gusto”.
El actor afirmó que el cine le dio más independencia y libertad, que los proyectos televisivos. “La libertad con la escribimos la película, la idea de que no tienes que preguntarle a nadie si puede o no pasar… me pareció fascinante esa idea de que es un riesgo que tu asumes desde el principio. Tuvimos libertad absoluta”.
“Es uno de los proyectos más padres en lo que he trabajado: El humor es chacoteo, es vacilada pero siempre he pensado que el humor hay que pensarlo con mucha seriedad, y llevarlo a cabo con humor… y ahí está el resultado para que lo vean todos”, dijo a Notimex el actor también conocido popularmente como el “Güiri-güiri”
Andrés Bustamante anunció la salida en breve de un making off de la película e hizo una invitación, sumada a la promoción que 20th Century Fox está llevando a cabo para que la gente de todas las edades acuda a alguna de las mil pantallas que a nivel nacional estrenarán El Crímen del Cácaro Gumaro.
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