Brasileños ven mala organización en Mundial; no hay clima futbolero

Reuters. A poco más de 20 día del arranque del Mundial de Futbol de la FIFA Brasil 2014, los brasileños perciben una mala organización en torno al magno evento; uno de los temas que más preocupan en la nación sudamericana tiene que ver con el excesivo gasto y con la seguridad.

Cabe señalar que Brasil, desde el 2003 cuando se dio a conocer que organizaría el Mundial, tuvo que realizar una serie de obras para cumplir con las disposiciones para albergar a la máxima fiesta del balompié.

El reportero Patricio de la Barra, en reporte para el noticiero “En los tiempos de la radio”, recordó que en ciudades como Brasilia, donde el futbol registra poco público, se decidió construir nuevos estadios, en lugar de cumplir con las demandas ciudadanas en torno a salud y servicios.

Agregó que la presidenta Dilma Rousseff “está, lamentablemente, más preocupada de su reelección que de gobernar el país”. Por lo que el brasileño está decepcionado con todo esto; “no está vibrante” por el Mundial.

Al contrario, se han registrado protestas ciudadanos, a las cuales se han ido sumando algunas organizaciones sindicales. Cabe señalar que la gente busca cambios, como una reforma para liberar al Supremo Tribunal Federal del gobierno, así como cambios en el Congreso Nacional, pues han llegado las personas más corruptas en la historia del Brasil.

Cabe señalar que pese a las condiciones con las que cuenta Brasil para crecer, económicamente hablando, “se dejó en el papel una serie de proyectos de infraestructura portuaria, de infraestructura carretera”, dijo el reportero. Cabe señalar que alrededor de 120 millones de personas tienen problemas para sobrevivir, mientras que sólo un puñado de brasileños tiene una vida de primer mundo.

Añadió que, a pesar de tener una economía más poderosa, Brasil ha crecido en un promedio menor que el de Bolivia, lo cual se achaca a la corrupción, problema cultural que se ha dado durante años en el territorio amazónico.

Cabe señalar que entre los brasileños hay una decepción muy grande en torno a su selección, pues la ven como una herramienta para la reelección de la presidenta Dilma Rousseff. Entre la población carioca “la expectativa es muy negativa con respecto a lo que pueda suceder en octubre”, cuando se lleven a cabo las elecciones.

De la Barra apuntó que de no concretarse las reformas en Brasil, el país no podrá crecer, a pesar de contar con los recursos para salir adelante. “Si hay una debacle económica en este país, Brasil corre el riesgo de arrastrar a toda América Latina”, dijo el reportero.

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