Festival en Bruselas destaca estilo de vida de entre 1950 y 2000

Notimex.- Un festival inusitado en Bruselas invita al público, este fin de semana, a un viaje en el tiempo de vuelta a los años 50, 60, 70, 80 y 90 para conocer o revivir las tendencias de esa época que siguen sirviendo de inspiración hoy en día.

“El panorama de medio siglo de tendencias, diseño, artes gráficas, moda, música y publicidad, presentado en un ambiente festivo, familiar y glamour”, anuncian los organizadores del primer festival Retrorama, la asociación sin fines lucrativos Brussels Vintage Market.

“El concepto seduce hoy a una gran comunidad cosmopolita de 20 a 40 años, individuos heteróclitos, pero unidos por el mismo deseo de conocer sus raíces y su evolución cultural”, observa el grupo, que ya ha realizado en Bélgica una serie de mercadillos mensuales con el tema.

Para el evento, el centro Brussel Expo ha ganado una decoración “vintage” y sus tres mil metros cuadrados han sido repartidos en espacios temáticos, ideados para un público de entre 7 y 77 años de edad.

Allí se instalarán tiendas efémeras de todo tipo de productos -ropas, accesorios, muebles, vehículos, juguetes, discos de vinil, fitas k-7, instrumentos antiguos-, además de un restaurante y un salón de belleza ofreciendo maquillajes y peinados en estilo retro.

Un espacio reservado estratégicamente al lado del bar estará dedicado a los “grandes niños”, con acceso libre a fliperamas, Atari, Game Boy y otros videojuegos antiguos.

Durante todo el largo del festival, dos escenarios acogerán conciertos ambientados entre 1950 y 2000, como el del rockero Cliff Richard, conocido como el Elvis Presley británico.

Una pantalla gigante transmitirá de manera continua publicidad famosa de las últimas cinco décadas, emisiones de televisión míticas, escenas de filmes y videos de músicas que marcaron época.

También se propondrán clases y espectáculos de danza, animaciones para los niños, y oficinas de habilidades manuales, donde se podrá aprender a hacer punto, ganchillo, patchwork.

El objetivo es que el evento se repita cada año y “se convierta en una referencia internacional, un punto de encuentro de los amantes del vintage en Bélgica y en Europa, y un espacio de aprendizaje para los menos enterados”, explicaron los organizadores.

“El “vintage” retraza la historia de nuestras sociedades. Es una manera lúdica de analizar la evolución de la sociedad en los últimos 50 años. Para conocer nuestro futuro, es necesario aprender nuestro pasado”, comentaron.