Argentina sufrió, pero ya está en cuartos de final

Foto: Cortesía

Por: Salvatore Galeazzi Oviedo.

Minuto 117, el partido empatado sin goles en la Arena Corinthians, todo listo para que se defina desde la pena máxima, pero los jugadores argentinos saben que tienen que terminar éste partido de octavos de final frente a Suiza antes de los penales, porque los europeos desde el inicio del segundo tiempo de la fase regular es lo que han buscado.

Un minuto después, el lateral derecho de la selección de Suiza, Stephan Lichtsteiner se durmió y Rodrigo Palacios, quien había entrado de cambio, tenía las piernas frescas y le robó el balón, este se lo dio a Lionel Messi, que le imprimió velocidad a la jugada, se quitó a un rival, levantó la cara, podía haber disparado, pero dio un pase medido, con ventaja, asistió de gol al volante Ángel Di María, quien de primera intención y con su fina pierna zurda, mandó el balón al fondo de las redes.

La emoción que había faltado en todo el partido, se compensó con los minutos finales. En un centro de Xherdan Shakiri, dejó enfrente de la portería y sin marca a Blerim Dzemaili, quien remató al poste y en el contraremate volvió a fallar, tuvo el empate pero la dejó ir. La emoción continuó, y en un tiro de esquina favorable a Suiza, el portero Diego Benaglio se fue a rematar, en la contra Di María disparó de media cancha con la portería vacía, y el dos cero no llegó.

El partido se alargó hasta el minuto 124, la última jugada del partido: tiro libre en los linderos del área grande, a cobrar Shaqiri, instantes de nerviosismo, desesperación y ansiedad por parte de los argentinos, si mete gol… el partido se va a penales, si no… Argentina avanza a cuartos de final. Disparó el mediocampista suizo, pegó en la barrera, y Argentina continúa con la posibilidad de levantar la copa.

El autor del único del partido, Ángel Di María comentó sus conclusiones acerca del desempeño de la selección Argentina: “dejamos el alma dentro de la cancha, dimos la vida en cada pelota, intentamos jugar siempre, nunca nos desesperamos, y creo que la victoria es más que merecida”.