Piden ver microfinanzas como salida a pobreza en Yucatán

Notimex. El delegado de la Procuraduría de la Defensa del Contribuyente, Marco Antonio Ponce Hernández, pidió ver a las microfinanzas como un instrumento necesario para combatir la pobreza, al otorgar créditos diferentes a los tradicionales de los bancos que representan elevados costos y numerosos requisitos.

Al participar en la inauguración del XIII Encuentro Nacional de Microfinanzas denominado “Impulsando una evolución integral de la microfinanzas”, reportó un “crecimiento importante” de este instrumento a partir de 2000 en el país.

“Sin ser una panacea, las microfinanzas representan un instrumento necesario para combatir la pobreza al conceder crédito a personas que no pueden acceder a préstamos tradicionales que otorgan los bancos, debido a los costos de transacción y a los numerosos requisitos”, consideró.

Las microfiananzas deben contemplarse como una alternativa de inclusión financiera o bien como un mecanismo para otorgar “capital semilla” para iniciativas productivas o de emprendimiento no asistencialistas, a fin de detonar micronegocios o medios de ocupación a segmentos de la población sin acceso al crédito tradicional, dijo.

Uno de los grandes retos en este tipo de financiamiento es el uso de tecnologías crediticias especializadas que se basan sobre todo en el conocimiento de sus clientes, razón por la que los créditos tradicionales no son aptos para satisfacer las necesidades especiales que requieren ciertos sectores de la población, apuntó.

Algunas de las ventajas de los microcréditos son “los beneficios para millones de hombres y mujeres, en especial este último segmento, que permiten mejorar las condiciones de vida tanto de ellas como de sus familias, además de contribuir al desarrollo de la economía del país, así como la equidad social y de género”.

Expresó que “el mundo de los micronegocios y de las microfinanzas es de ellas, ya que el 75 por ciento de los beneficiarios a nivel global es mujer. En México, por grupos de mujeres representan de 93 a 95 por ciento de los clientes y en crédito individual, 62 por ciento”.

Sin embargo, Ponce Hernández recalcó que es indispensable que la microempresa o el microempresario logren un desempeño financiero óptimo y que su actividad se desarrolle en el marco de la formalidad y la capacitación.

Asimismo, planteó, “debemos recordar que el mundo de los negocios es un entorno extremadamente dinámico que exige a los emprendedores estar aprendiendo todo el tiempo y reinventándose, por ello la capacitación tiene que ser constante”.