Inician estudiantes del IPN huelga de hambre por la liberación de jóvenes detenidos

MVS. La noche de este dos de diciembre, la Asamblea General Politécnica (AGP) niega interrupción de la 7ª  mesa de diálogo por “intransigencia”, como señalaran las autoridades federales; “nuestra preocupación y petición es legítima, no podemos soslayar los actos represivos” generados desde las autoridades de los gobiernos federal y del Distrito Federal”.

En un comunicado, expresan que “no pueden llamarnos intransigentes por exigir la liberación de nuestro compañero del CECyT 9 ‘Juan De Dios Bátiz’; él, Ariel Flores Pérez (18 años) también es comunidad politécnica y no podemos regresar a las aulas mientras haya estudiantes tras las rejas”, expresan los jóvenes que alegan inocencia y detención “arbitraria” de su compañero aprehendido tras los disturbios del pasado 1º de diciembre.

Los politécnicos subrayaron que las autoridades se retiraron de la mesa después de un receso de 30 minutos, “sin dejar informe” y agregaron, “nosotros habíamos evaluando retomar el diálogo con la carta compromiso, la recalendarización y entrega de instalaciones. Sin embargo, no dieron tiempo de emitir nuestra postura ya que habían abandonado el auditorio” ‘Alejo Peralta’ de Zacatenco.

En el marco de este pronunciamiento, 14 alumnos de la vocacional 9 del IPN, han iniciado una huelga de hambre a las puertas de la Fiscalía Desconcentrada de Investigación en la Gustavo A. Madero, Coordinación Territorial GAM 4, en demanda de la liberación de tres estudiantes detenidos: Demián Reyes Lara, estudiante de 20 años de la Facultad de Filosofía de la UNAM; Óscar Espinoza Trigueros, alumno de 18 años del CCH Oriente de la UNAM y el ya señalado Ariel Flores Pérez, de la vocacional 9 del IPN.

“No vamos a comer, estamos en huelga de hambre y nos vamos a quedar afuera del MP hasta que lo saquen”, declaró Gustavo, un bachiller de 15 años tras comentar que así como fue detenido Ariel Flores, “pudo haber sido cualquiera de nosotros, así que aquí afuera vamos a estar acompañándolo hasta que salga”.

“Como las autoridades no nos dan respuesta, esperamos que nuestra huelga ejerza un poco de presión para que lo puedan liberar”, dijo Erik de 17 años de edad. Después de haber sido revisados por sus compañeros de la Escuela Superior de Medicina, un chico hipoglucémico de 19 años, de apellido Ballesteros, también se declaró en huelga de hambre; señala que si le da un ataque le puede dar “parálisis corporal y pérdida de la conciencia”, pero asegura que ya tomó las medidas necesarias y que si llegara a tener una crisis “los compañeros ya saben cómo tratarme”.

“Todos ya estamos cansados de la situación, pero nos mantendremos junto a nuestros compañeros detenidos… que venga lo que tenga que pasar”, concluyó Luis Eduardo de 17 años de edad.