Nuevamente, Mario Marín Torres se quedó con las ganas del poder

Mario Marín Torres. Foto de Carlos Muñoz.

Por: Carlos Muñoz.

El 2010 ha quedado atrás y el morenovallismo le ha pasado por encima al PRI en Puebla, hoy el mandado del gobernador del Estado, Rafael Moreno Valle preocupa hasta el propio Presidente de México. Luego de la visita de Enrique Peña Nieto a la Angelópolis y después de no ver la manera en cómo colocarlo como candidato a una diputación federal, Mario Marín Torres se ha quedado de nuevo en la orilla electoral y ni siquiera ha sido considerado como pre-candidato ni mucho menos asistido al Comité Estatal a intentar registrarse.

La llegada de Adolfo Karam Beltrán a través de Ana Isabel Allende fue el mayor logro de los últimos meses por parte de Marín Torres, y es que ambos personajes prácticamente no han sufrido ya que el “chaparro” pone y dispone de ellos en cualquier instante, pero al final no todo fue “azul cielo”.

Son las elecciones 2015 donde el PRI se juega una pugna muy importante, de vida o muerte, no hay mañana para el “tricolor” es por ello que EPN le hizo la invitación a Lorenzo Rivera Sosa, Matilde Roldán, Alejandro Armenta, entre otros elementos para proyectarse como firmes candidatos haciendo a un lado al polémico Fernando Morales Martínez, castigado por el partido a nivel estado tras su nula presencia en los últimos dos años y por haber asistido al Cuarto Informe de Labores de Moreno Valle Rosas, cita al que no tendría presencia ningún “priista gordo”.

Atrás quedó la sombra de Pablo Fernández del Campo, 16 distritos electorales y al menos el PRI apunta a ganar seis distritos aunque parece ser que la pugna está más que decisiva. La influencia de Moreno Valle y del neopanismo hace vibrar cualquier rincón poblano, la última decisión la tendrá la ciudadanía, aunque el abstencionismo se encuentra a la vuelta de la esquina.