Notimex. Con tres coreografías de uno de los pilares de la danza contemporánea mexicana, Raúl Flores Canelo (1929-1992), el Ballet Independiente festejó la víspera su 49 aniversario en el Teatro de la Ciudad Esperanza Iris.
“Celebración del XLIX aniversario del Ballet Independiente” fue el nombre del programa que la agrupación fundada por Flores Canelo ofreció y que incluyó las coreografías “El bailarín”, “Tres fantasías” y “Queda el viento”, que fueron presentadas a lo largo de una hora.
En esta función especial, el Ballet Independiente demostró a los asistentes, a través de movimientos llenos de fuerza, porqué es una de las compañías que más ha permanecido en el gusto del público y es merecedora del reconocimiento de la crítica especializada.
La gala contó con la presencia de la directora general del ballet, Magnolia Flores, y la directora artística, Elisa Rodríguez, quienes agradecieron junto con los bailarines al público, que los acogió con aplausos desde el principio y hasta el final de la presentación.
Las coreografías muestran la cultura mexicana que Raúl Flores Canelo percibió y representó a través de expresiones corporales para compartir un discurso que incluye crítica, sarcasmo y humor.
La celebración comenzó con “El bailarín”, coreografía que rinde homenaje Ramón López Velarde (1888-1921) y que incluye un verso en el que el poeta hace una estampa de la figura de quienes se dedican a la danza como profesión.
Para continuar, la agrupación ejecutó “Tres fantasías sexuales”, integrada por: “Cazador nocturno”, que narra el encuentro homoerótico y secreto de dos hombres a través de la danza.
“La redentora”, que muestra a una mujer que intenta adoctrinar a un nativo que se resiste y que al final la termina seduciendo con su inocencia y por “Tragedia del maistro albañil”, pieza que cuenta la historia de un trabajador que fantasea con una mujer que pasa por la calle y que es blanco de sus halagos tan particulares; estas dos fueron de las preferidas del público.
Después de un intermedio, se presentó la tercera coreografía, “Queda el viento”, que reunió a todos los miembros de la compañía para protagonizar un recorrido a través de la historia de México que va desde La Conquista hasta el movimiento estudiantil de 1968.
Las dos primeras coreografías utilizaron piezas musicales de Eleni Karaindrou (1941), Manos Hadjidakis (1925-1994), Paul Winter (1939), David Darling (1941), Henry Mancini (1924-1994), Silvestre Revueltas (1899-1940) y Pedro Flores (1894-1979), entre otros.
Mientras que la tercera se apoyó de melodías de Julián Carrillo (1875-1965), Cuco Sánchez (1921-2000), José Alfredo Jiménez (1926-1973) y Manuel M. Ponce (1882-1948), entre otros compositores.
Desde la fundación de la compañía, en 1966, el coahuilense Raúl Flores Canelo rompió con la solemnidad que dominaba la danza mexicana y aportó frescura, irreverencia, alegría, crítica y su particular visión sobre el pueblo mexicano en su trabajo artístico.
El coreógrafo dejó 40 obras que el ensamble ha sabido llevar con un alto nivel interpretativo y que a través de los años, sin dejar de un lado lo experimental en la danza, ha mantenido la esencia de su fundador.
La agrupación dancística con carácter legal de Asociación Civil, desde 1975 hasta 2010 fue una de las tres compañías oficiales de danza contemporánea respaldada por el Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA).
El Ballet Independiente ha realizado giras por todo el país, así como por Alemania, Cuba, El salvador, Estados Unidos, Francia, Guatemala y Holanda.
Actualmente, el ensamble también es un espacio que apoya a los jóvenes talentos de la danza, formando nuevas compañías y a grandes bailarines, y ofrece sus presentaciones a todo tipo de público en diversos escenarios.
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