Avalan crear Código de Ética y Conducta Parlamentaria en San Lázaro

Notimex. Con el fin de recuperar la confianza de la ciudadanía en los 500 diputados y diputadas que integran la LXIII Legislatura Federal, el Pleno de la Cámara de Diputados aprobó en votación económica el exhorto para crear en San Lázaro un Código de Ética y Conducta Parlamentaria de carácter obligatorio y coercitivo.

Después de que la diputada del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Carolina Monroy presentó este punto de acuerdo de urgente, el presidente de la Cámara de Diputados, Jesús Zambrano Grijalva, remitió el documento a la Comisión de Régimen, Reglamento y Prácticas Parlamentarias, para su análisis y dictaminación.

Al argumentar la propuesta, la diputada priista señaló que este código deberá estar acompañado de una regulación formal, así como en un actuar basado en principios y valores que los aleje de conflicto de interés, de actos deshonestos y opacidad.

Destacó la enorme responsabilidad de ser legislador sobre todo, por la toma de decisiones que se toman en el Congreso sobre la vida nacional.

“Debemos atender con honradez, honestidad y absoluta disciplina el mandato de servicio que nos impone el ser diputadas y diputados, de responsabilidad de representar nada menos que a 112 millones 336 mil 538 mexicanos”, afirmó.

Reconoció que no se puede creer que las cosas serán distintas si a partir de ahora no se hacen las cosas diferentes, y les dijo a los diputados que si se quieren percepciones y resultados distintos se debe de dejar de hacer lo mismo de siempre.

Pero, añadió, deben de hacerlo como personas sin mayor ideología que el deseo de ser íntegro y dignos de la confianza con trabajo y buenos resultados.

Citó como ejemplo, que en el afán de que esta LXIII Legislatura ponga el precedente en este tema, se deberá de regular o dejar de vender bebidas alcohólicas en los restaurantes que están dentro del Palacio Legislativo de San Lázaro, ya que afirmó que los diputados no pueden tener privilegios diferentes a otros trabajadores.

Por lo que les preguntó que si es imprescindible que se siga permitiendo la venta de bebidas alcohólicas en instalaciones de la Cámara de Diputados.

“Este ejemplo en relación a las bebidas alcohólicas, sé que puede ser visto como algo no sustancial, por sí solo no lo es, como parte de una conducta general mucho menos; sin embargo, me pregunto ¿debemos tener los diputados un tratamiento diferente al de cualquier otro trabajador, es que en nuestro centro de trabajo, entonces sí se permite y no en otros?”.

Indicó que “no me refiere a la decisión personal de cuánto consumir, sino al hecho original de que frente a otros ciudadanos que trabajan, nosotros gozamos de posibilidades distintas. Quisiera solicitar que la administración de esta Cámara tome las medidas correspondientes, en realidad no nos parece que pudieran ser tan difíciles de lograr”.

A nombre de la fracción parlamentaria del PRI, Monroy del Mazo presentó esta proposición con punto de acuerdo, que tiene como objetivo la creación y adopción del Código de Ética que complete la normatividad de la Cámara de Diputados.

Es decir, que se sume a lo que les plantea y obliga la Constitución, la ley Orgánica del Congreso de la Unión y el Reglamento interno de la Cámara, por lo que confió en la decisión de todos los diputados y diputadas para apoyar este llamado.

Señaló que los códigos de conducta o de ética son una herramienta esencial que ha sido adoptada por varios países como Francia y Alemania, así como en Estados Unidos, Canadá, Japón, Reino Unido, Paraguay, Perú y Chile que en los últimos años lo realizaron con éxito.

En legislaturas pasadas se han presentado en la Cámara Diputados al menos 30 iniciativas y puntos de acuerdo que pretendieron desde la creación de una ley federal de ética parlamentaria, hasta la integración de una comisión que se encargaría de vigilar que los legisladores se rigieran por los principios básicos de educación y convivencia.