Por: Melanie Isahmar Torres Melo.
Hasta tres años después de haberse perpetuado un feminicidio, las familias de las occisas no han encontrado Justicia para sus casos, pues en Puebla, la mayoría de los feminicidios continúan en la impunidad.
Esa es la situación de Araceli Vázquez Barranco, asesinada en su propia casa a manos de su ex novio, quien se encuentra prófugo desde hace tres años que cometió el delito, y según narró la mamá de Araceli, las autoridades se han negado a realizar una búsqueda exhaustiva del asesinono, llegando incluso a proponerle que sea ella quien lo busque.
Para Olga Nayeli Sosa Romero, asesinada, descuartizada, quemada y enterrada hace dos años a manos de su esposo, la justicia tampoco ha llegado, pues pese a que el asesino confesó a detalle el crimen, no se le ha dictado sentencia por tener influencias con las autoridades.
Durante el mitin realizado tras la manifestación organizada por la comunidad Universitaria de la BUAP, la mamá de Olga Nayeli denunció que el asesino de su hija está protegido por el Magistrado Manuel Nicolás Ríos Torres, razón por la que no se le ha dictado sentencia e incluso se está buscando que el inculpado tenga una prórroga de un año para posteriormente seguir con el proceso.
Entre lágrimas, la mamá de Nayeli también pidió por su nieta, quien estuvo secuestrada 8 meses por sus abuelos paternos, y actualmente de encuentra entre la casa de sus abuelos paternos y la de ella.
Uno de los casos más recientes es el de Giseh Castelán, asesinada el 2 de octubre de este año de varias puñaladas, y al igual que en los casos de Araceli y Nayeli, no se ha remitido a los responsables de su asesinato.
En su intervención, el padre de Giseh, Vicente Castelán, detalló que su hija salió de su trabajo en el ISSSTEP, abordó su vehículo rumbo a su casa y nunca llegó, fue hasta el otro día cuando le notificaron que la habían encontrado muerta.
Vicente señaló que la Fiscalía no le ha brindado información acerca de las investigaciones y únicamente le dicen que “van bien”. Vicente recurrió a investigar por su cuenta y encontró a personas que vieron cómo ultimaron a su hija, las ha llevado a declarar, pero señaló con tristeza “Creo que a la Fiscalía no le interesa”.
Por su parte, la mamá de Paulina Camargo Limón, recordó la frialdad con la que José María Sosa, asesino de Paulina, se mantuvo a su lado mientras ella buscaba en hospitales, sitios de taxi en el semefo, valsequillo y finalmente en la basura.
“Ella iba sólo a tomar un café y jamás la volvimos a ver” recordó con profundo dolor la mamá de Paulina, quien hizo énfasis en que el único pecado de su hija fue confiar en el padre de su hijo, que en repetidas veces le pidió que abortara e incluso se desapareció cuatro meses hasta el día en que acabo con Paulina y su hijo.
“Supe que la había golpeado y asfixiado…. he tenido que vivir con esa imagen todos los días desde entonces, señaló la mam de Paulina, quien pese a lograr encarcelar al asesino de su hija, aún no puede estar en paz, pues a poco más de un año de los sucesos aún no recuperan el cuerpo de la joven de 19 años.
En la explanada del parque Juárez, la madre de Paulina hizo un llamado a la sociedad para que se unan entorno a la búsqueda de Justicia para cada una de las jóvenes que han sido arrebatadas de sus hogares. Asimismo, los padres de familia hicieron un llamado al gobernador para que se resuelvan sus casos y no sigan ocurriendo feminicidios en el estado.
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