Tarde o temprano será más caro el transporte público por el “gasolinazo”: ONG

Foto: Alejandro Muñoz

Redacción.- Ante el aumento de las gasolinas que podría desincentivar el uso del automóvil, el Instituto de Políticas para el Transporte y el Desarrollo para América Latina y El Poder del Consumidor advierten que millones de usuarios tarde o temprano pagarán un transporte público “más caro, inseguro, incómodo y lento”, debido al “desconocimiento”y al “abandono” de las autoridades federales ante los verdaderos problemas de movilidad en las grandes urbes del país.

Victor Alvarado, investigador de Movilidad y Transporte de El Poder del Consumidor, destacó que “si de por sí vivimos en un colapso vial, donde el transporte público para el usuario es un servicio inseguro, incómodo, lento al que le invierten de tres a cinco horas para moverse en la ciudad, en la actualidad no hay condiciones para transportar a las personas de forma segura”.

“El aumento a las gasolinas es un pequeño síntoma, ante el problema de transporte en las grandes urbes, que data de más de 40 años atrás porque México diseñó ciudades para el tránsito de automóviles y no de personas”, agregó Alvarado.

En el Valle de México, estudiantes y trabajadores dependen en un 80% del transporte público quienes se han quedado “en el olvido” por la falta de acciones que garanticen un transporte público sustentable y eficiente, enfatizó Alvarado.

Convencido de la urgencia de mejorar el medio ambiente, Alvarado reconoció que con el aumento de las gasolinas “se logra desalentar el uso del automóvil, pero a nivel federal no se ha apostado por una política pública que destine recursos al transporte público. De 10 años para acá, la obra pública ha propiciado el uso del automóvil con creación de infraestructura vial. Ahora debe respaldarse el transporte público y con el paso de los meses nos vamos a dar cuenta de las consecuencias de las decisiones tomadas”, agregó el investigador de El Poder del Consumidor.

El gran reto recae sobre todo en las ‘horas pico’ sobre todo en líneas del metro y Metrobús, consideró Bernardo Baranda, del Instituto de Políticas para el Transporte y el Desarrollo para América Latina.

“Una parte del sobrecosto del costo de las gasolinas debería fortalecer el sistema de transporte para mejorar la frecuencia del servicio con más trenes y camiones”, llamó el experto.

“El aumento a las gasolinas es una oportunidad para impulsar el transporte público por calidad ambiental, razones económicas y de tiempo, la movilidad en autos particulares ya no da; debe quedar claro que en la actualidad es mucho mejor mover a la población en transporte público”, agregó.

“Al metro se le ha dado poco mantenimiento y eso hay que revertirlo; también existen otras opciones ante el gran flujo de usuarios de transporte público en horas pico como la apertura de carriles extras al Metrobús; además podrían operar horarios escalonados de trabajo, hacer más eficiente y ampliar el uso del transporte escolar e impulsar la vivienda accesible cercana a los sitios de trabajo como en las colonias Doctores, Obrera o en el Centro Histórico”, agregó Baranda.

“Es inadmisible que gobierno del Estado de México solo haya invertido en el tren suburbano cuando provoca una gran cantidad de flujo humano todos los días a la Ciudad de México; la situación no es pareja, ahí hay un gran déficit en la falta de inversión a transporte humanos”, apuntó.

El director para Latinoamérica del Instituto de Políticas para el Transporte y el Desarrollo resaltó que el 90% de la congestión vial en la capitalina del país la crea el automovilista quienes solo representan al 30% de la población que transita por la ciudad. Urgen acciones más contundentes e inversión en transporte público coordinada entre los gobiernos federal y estatales, apuntó en entrevista a Noticias Mvs.

Stephan Brodziak, coordinador de Salud Ambiental de El Poder del Consumidor resaltó ante los micrófonos de Noticias Mvs que se registró el aumento de las gasolinas sin haber desarrollado un eficiente servicio público de transporte a nivel de metrópolis.

“Incluso en la Ciudad de México que ha hecho cosas muy favorables, nos falta madurar el transporte público. Aún vemos muchas rutas del Estado de México o Guadalajara controladas por las mafias de transportistas que son dueñas de las concesiones por relaciones políticas. Eso ha traído conflictos de interés y ha permitido que el modelo de hombre camión sea sustituido por un modelo empresarial que no ha garantizado mejor trato, ni al usuario ni al operador, que bajo este esquema, tienen una mala calidad laboral impuesta por una ‘guerra de centavos’ para ganar el pasaje, en los paraderos, o al hacer base en cruceros transitados. Todas estas prácticas que deterioran la movilidad”, agregó.

Lo que hemos solicitado desde hace varios meses es que parte de lo recaudado por la gasolina se destine al desarrollo de la infraestructura no motorizada y el transporte público para garantizar una opción, cómodo accesible y eficientes en las grandes urbes del país, finalizó.

“Cuando se aumenta la gasolina hay impacto en el costo del transporte público, pero si va a subir la tarifa esperaríamos que el servicio también mejorara. Urgen mecanismos para que el usuario final no sea quien termine pagando de más, sino que el aumento esté condicionado a un mejoramiento del servicio”, concluyó el activista.

Con información de MVS.