Notimex. Con más de seis mil museos que abarcan arte, ciencia, técnica e historia, Alemania es uno de los centros artísticos de Europa que ofrece además este año una amplia oferta expositiva para los amantes del arte con la Documenta de Kassel como la gran cita del año.
El mayor evento del mundo artístico que arranca el 10 de junio en Kassel comparte este año sede con una ciudad fuera del país por primera vez en su historia, siendo Atenas, Grecia, la elegida, donde se inauguró el pasado abril.
Otras grandes citas del año son una gran exposición dedicada al reconocido pintor surrealista belga René Magritte, en la Shirn Kunstalle de Frankfurt (entre el 10 de enero y el 5 de junio) y otra dedicada a su compatriota Marcel Broodthaers en el K21 de Dússeldorf (4 de marzo al 11 de junio).
Asimismo, la muestra dedicada a las instalaciones como espacios narrativos en la estación de tren central de Hamburgo (17 de marzo y 17 de septiembre).
El V centenario del nacimiento del protestantismo luterano en Alemania marca también la escena artística del año, con una exposición central en el Martin-Gropius-Bau de Berlín que muestra entre el 12 de abril y el 5 de noviembre un amplio panorama de la diversidad, las repercusiones históricas y el potencial conflictivo del protestantismo entre las culturas.
En ese marco ofrece también el Deichtorhallen de Hamburgo una gran exposición del artista mediático estadunidense Bill Viola, que tematiza en sus obras el existencialismo teológico de Martin Lutero como ningún otro artista del siglo XXI, señalan los organizadores. La cita es del 2 de junio al 10 de septiembre.
El genio italiano Jacopo Tintoretto, de cuyo nacimiento se cumplen también cinco siglos, es homenajeado en la gran muestra “Tintoretto-A Star was born” (Tintoretto, nació una estrella) en el museo Wallraf Richartz de Colonia entre el 6 de octubre y el 1 de enero de 2018.
Otro gran nombre, Paul Cézanne, será homenajeado en una muestra en la Staatliche Kunsthalle de Karlsruhe entre el 10 de octubre y el 11 de febrero del próximo a año.
Alemania es uno de los centros del arte en Europa, con museos a lo largo y ancho de todo su territorio, aunque son dos las ciudades que conforman los principales ejes que agrupan la actividad creativa: la capital del país, Berlín, y la de Baviera, Múnich.
En esas dos ciudades cuentan con un área específica que concentra la actividad expositiva: la Isla de los Museos (Museumsinsel) en Berlín y el distrito artístico (Kunstareal) de Múnich.
La Museumsinsel berlinesa es, como su nombre indica, una isla de arte en medio del río Spree que recorre la ciudad: ocupa la parte norte de la Spreeinsel (isla del Spree) y ya en 1841 el rey Federico Guillermo IV de Prusia dedicó el área residencial que allí se encontraba al arte y a la ciencia.
Los posteriores reyes prusianos fueron congregando allí sus colecciones de arte y arqueología, que fueron agrupadas antes de quedar separadas durante la Guerra Fría y la división de Berlín, para volver a juntarse después de la reunificación en octubre de 1990.
Las colecciones en esta isla berlinesa permiten una visión de conjunto del arte europeo desde la Antigüedad hasta el siglo XIX, expuesta además en edificios muy significativos de la historia museística bajo la presencia de la catedral de la ciudad, lo que llevó a la Museumsinsel a convertirse en Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO en 1999.
El primero de los museos fue el Altes Museum o Museo Antiguo de Berlín, construido entre 1823 y 1830 según los planos del arquitecto prusiano Karl Friedrich Schinkel y destinado a albergar los cuadros de los castillos de Berlín, Postdam, Charlottenburg y dos colecciones privadas.
Este museo fue la primera sede de la colección prusiana de antigüedades de Federico Guillermo III. Alberga una espectacular colección de joyas, aunque su punto fuerte es el arte y las ánforas de la antigua Grecia. En el centro del museo hay una rotonda sostenida por 20 columnas corintias.
Su contrapunto es el Neues Museum o Museo Nuevo, terminado en 1859 conforme a los planes del mismo arquitecto, que quedó casi totalmente destruido durante la Segunda Guerra Mundial y fue reconstruido hasta 2009 por el arquitecto David Chipperfield, por lo que permaneció cerrado casi 60 años. El propio edificio narra su historia, combinando lo contemporáneo con la decoración antigua de las salas.
El centro alberga colecciones de arte nórdico y nacional, entre otras, así como de arte egipcio y prehistórico, entre ellas el famosísimo busto de Nefertiti y otros objetos del Período de Amarna, así como piezas de la antigüedad clásica o las copias del Tesoro de Príamo halladas en la antigua Troya.
Pero quizá el más impresionante de los museos de arte antiguo es el Museo de Pérgamo, terminado en 1930, el último construido en la isla pero el más frecuentado.
Y es que recibe a los visitantes con un viaje al tiempo que abarca seis mil años, y con edificios de tamaño original antiguos como el altar de Pérgamo, la puerta de Ishtar de Babilonia o la del mercado de Mileto, con partes auténticas traídas de esas ciudades antiguas, y después reconstruidos en Berlín. También tiene una de las colecciones más impresionantes de piezas de arte islámico y de Medio Oriente.
El Museo Bode, también en la Isla de los Museos, alberga arte antiguo y colecciones bizantinas. Originalmente era conocido como el Museo del Kaiser Federico, reconocible por su cúpula de marrón cobrizo reconstruído en las últimas décadas.
Pero quizá la mayor colección de la Museuminsel de Berlín es la que alberga la Alte Nacionalgalerie o Galería Nacional Antigua, una de las mayores colecciones de escultura y pintura del siglo XIX que existe en Alemania, creada a raíz de un movimiento de artistas patriotas que en 1848 exigió la fundación de un museo dedicado al arte alemán.
El museo tiene fondos importantísimos del realismo, impresionismo y el romanticismo artístico, con piezas de Menzel Liebermann, Monet, Cezanne, Renoir y Manet o los escultores Schadow y Rodin. El edificio también quedó destruido durante la guerra y no fue reabierto hasta 2001.
Aunque quizá el fondo más importante de pintura en Alemania lo acoge la Gemäldegalerie, también conocido como La Pinacoteca, dedicada a la pintura europea de los siglos XIII al XVIII, que reunificó su colección desde 1997.
En nada menos que 72 salas con una superficie total de siete mil metros cuadrados, acoge obras clave de maestros como Van Eyck, Bruegel, Durero, Rafael, Ticiano, Caravaggio, Rubens, Rembrandt y Vermeer entre muchos otros. Entre los destacados del siglo XVII están Canaletto, Watteau y Gainsborough.
En Múnich, el equivalente a la isla de los museos berlinesa en el distrito de arte o Kunstareal, situado en el centro de la ciudad, que concentra las principales salas expositivas: las tres pinacotecas de Múnich, que acogen obras que datan desde la época antigua hasta la contemporánea, que alternan con exposiciones temporales.
La Alte Pinakothek o Pinacoteca Antigua reúne una de las principales colecciones de artistas como Rembrandt, Durero, Rubens y Rápale, mientras la Nueva Pinacoteca centra su colección en la pintura alemana del siglo XIX, además de esculturas y pinturas europeas que van desde la mitad del siglo XVIII hasta comienzos del XX.
Ambas se complementan con la Pinacoteca de Arte Moderno (Pinakothek der Moderne), que alberga una colección de arte contemporáneo importante. La zona se completa con la Glyptoghek, que acoge arte griego antiguo y el Museo de Antigüedades. Para el arte moderno, el museo es el Lenbachhaus.
No Comments
Comments for Alemania con el orgullo de tener museos a lo largo y ancho de su territorio are now closed.