La influencia del periodismo digital en el escándalo político

Foto: Internet

Por:  Brenda Serrano.

¿Qué es un escándalo?

La palabra escándalo tuvo sus inicios en la antigua Grecia, era utilizada para referirse a alguna trampa o falla moral en la fe. Se usaba principalmente en el aspecto religioso, poco después, cuando fue adoptada por varias lenguas comenzó a perder el carácter religioso.

Poco a poco, este término fue tomando un sentido más laico, actualmente escándalo hace referencia a las transgresiones que dañan a los códigos morales, normas o valores, cuya información de dichas acciones es revelada a terceros, provocando una respuesta alarmante del público que muestra desaprobación.

 El desarrollo de la influencia digital

La comunicación comenzó desde la forma más sencilla y básica. La interacción cara a cara resultaba imprescindible, la información únicamente se transmitía de boca en boca y, en ocasiones, la idea principal se distorsionaba en el transcurso de la cadena de emisión como un teléfono descompuesto. No obstante, aunque en los medios de comunicación actuales se puede plasmar ampliamente  la información de acuerdo a la investigación de los hechos,  el asunto se torna complejo, tanto por lo exhaustivo de los contenidos como por la variedad de interpretaciones que logren generar.

Los medios digitales son las herramientas con mayor poder comunicativo en el mundo contemporáneo, precisamente por esta razón, cierta clase de publicaciones colocadas en estos espacios, podrían llegar a producir un interés o una reacción desbordante. Por ejemplo, la atención que producen los actos fuera de lo convencional o de las normas establecidas, en lo que, no pocas veces, incurren los personajes públicos: políticos, actores, etc.

La creciente demanda de información ha dado lugar  a que la audiencia solicite noticias cada vez más espectaculares. En general el periodismo -“negocio de chacales” según la designación de cierto personaje de una novela de Julio Patán- se encarga de buscarlas, aderezarlas y exhibirlas. Las consecuencias de esta práctica son cada vez más lesivas e intensas. La región frontal y trasera de la figura política interfiere en la opinión pública; según la teoría de John B. Thompson, explicada en su libro “Escándalo político”. La desmotivación ciudadana es directamente proporcional a los desórdenes de las conductas de los servidores públicos.

El periodismo sensacionalista ha trastocado la visión de un periodismo más profesional. Por otro lado, las propias tecnologías de la información y la comunicación (TIC), han facilitado los procedimientos, sin restricciones, de casi cualquier tipo de contenidos.

Medios digitales masivos vs figuras políticas

La historia de los escándalos se ha transformado a través de los años, en cuanto a la forma de difusión, sin embargo, el posible contexto no es totalmente nuevo, por el comportamiento de los políticos, el periodismo digital y sus lectores tienden a analizar dicha conducta, pero también a reprobarla de tal manera que subestiman la función del dirigente político. . La accesibilidad del internet aumenta el calor de los escándalos.

Por un lado, hay periodistas que deciden dar a conocer los sucesos tal y como son porque tienen la convicción de que sus lectores o habitantes merecen saber la verdad; pero hay otros que eligen revelar los acontecimientos agresivamente, atacando a los actores políticos con el propósito de incrementar sus ventas.   Es posible que los hechos salgan a la luz; a pesar de que los implicados practiquen una y mil artimañas para poder ocultarlos.

El periodismo de investigación se encarga de ahondar en la rendición de cuentas de los altos funcionarios, de sumergirse en los sectores privilegiados y en áreas restringidas; descubrir lo que sucede cuando no están vigilados por millones de ojos o al aire de algún medio. A esto se le denomina región trasera. Esta parte es muy delicada, ya que ahí se pueden encontrar evidencias de una corrupción, o de una imagen completamente opuesta a la que muestra públicamente, llamada región frontal.

¿Cómo el periodismo digital dificulta, obstruye o engrandece el poder simbólico del político?

El poder simbólico se refiere a la reputación y confianza que ofrece el político. Requiere de esfuerzo, carácter y competencia para conseguir una buena reputación, y busca transmitir apertura y credibilidad a sus colegas y ciudadanos, según la teoría social de John B. Thomson.

Twitter, Facebook y blogs personales son sitios que utilizan los periodistas para difundir noticias, pero también para exhibir aspectos positivos o negativos del político.

Por otro lado, hay publicidad que reafirma las propuestas de los diputados y presidentes municipales, ya sea del estado o país. Repentinamente, en páginas webs en YouTube surgen anuncios, que corroboran la buena impresión que tanto trabajo les ha costado forjar, los políticos hacen hincapié en las sumas obtenidas por beneficios de infraestructura o datos que indican la disminución de problemas sociales.

Algunos periodistas respaldan esta información; sin embargo, otros refutan estas cifras, exponiendo las posibles trampas o lo que hay detrás de cada palabra pronunciada por el funcionario público o representante político. Es más común que este último factor se dé a partir de la aparición de las notas digitales.

 Carmen Aristegui, la periodista mexicana tiene la posibilidad de publicar sus opiniones en distintos medios, y que miles de personas las lean, aceptando todo lo que comparte. Es probable que influya en la percepción de la gente, ya que se le reconoce como una profesionista talentosa y transparente. También, se encuentran  los consorcios mediáticos que apoyan fielmente las decisiones de las altas autoridades, permiten de alguna manera emitir características que reprueban o enaltecen el perfil de un político, de acuerdo a su ideología.

Por otra parte, es sustancial resaltar el impacto que tiene el periodismo digital en la construcción de la imagen de un país, basado en una figura política, es decir, el periodismo digital al ser difundido por internet, se convierte en información mundial, dejando a un lado los límites. A partir de la información que se presenta con respecto a una nación, se determina la imagen política de una sociedad.

No sólo se habla de los políticos y sus asuntos, sino de las referencias progresistas de cada país; sin importar que se les denomine primeras potencias, países desarrollados, subdesarrollados o tercermundistas. La aparición de constantes noticias en los medios digitales, especialmente porque una persona tiene acceso a periódicos estatales, nacionales e internacionales; tienen el inconveniente de generalizar o etiquetar a la sociedad, respecto a las acciones que se dan en la esfera política, ya que son los representantes de una comunidad o país.

La figura del actual presidente de México, Enrique Peña Nieto, integrante del PRI (Partido Revolucionario Institucional) en su período de gobernación 2012- 2018, se ha visto muy dañada por los medios digitales. Los periodistas y habitantes arrojan injurias contra él, denuncian que es un personaje que no merece ejercer el poder político, ya que ha cometido muchos errores y dudan de que haya llegado a ser presidente con un proceso electoral justo.

Igualmente se han originado una serie de habladurías acerca de su vida privada, se rumora que mató a su anterior esposa, Mónica Pretelini. Se generaron transgresiones de segunda orden, pero aseguró que era una calumnia y difamación lo que estaban declarando, pues los miembros de los otros partidos políticos, PAN (Partido Acción Nacional) y PRD (Partido Revolucionario Democrático), lo acusaban de ello en la cámara de diputados. Este suceso se dio antes de su candidatura, y repercutió en su imagen y reputación; sin embargo, aun así, logró obtener la presidencia, el escándalo en el que se vio inmerso favoreció su posicionamiento.  No se ha podido comprobar si lo que se rumoraba es cierto, situación que exageran en las notas amarillistas. También se hace mofa de su estado salud.

Diversos escándalos han girado en torno a Enrique  Peña Nieto, los medios digitales se han encargado de publicar e informar aspectos negativos de él, los usuarios están frente a estas pantallas o dispositivos durante largas horas, así que reciben gran influencia en el momento en que los informantes con tanta insistencia, a través de estos medios, difunden los perjuicios que ha cometido Peña Nieto, ofuscando el bienestar de México.

Como consecuencia de todos estos escándalos, algunos informes, noticias y artículos han conseguido que el presidente actual haya perdido la credibilidad en el informe de sus resultados, de tal forma que la ciudadanía se centra con mayor frecuencia en lo que ha hecho mal, dejando a un lado sus aspectos positivos, ya que es muy importante la procedencia de un actor público o político para su posible reconocimiento.