Productos de belleza que debes usar si tienes más de 40 años

Mejor con Salud.- A los 40 la piel pierde elasticidad, firmeza y la capacidad de regeneración epidérmica ya no es la misma. Usar productos hidratantes y humectantes es esencial en el cutis de piel madura.

Tarde o temprano debemos entrar a la etapa de madurez y no hay nada que podamos hacer para evitarlo; simplemente llega la transición en la que la estructura de la piel adquiere un aspecto diferente.

Llegar a los 40 implica un cambio a nivel emocional, biológico y físico. Particularmente, la mujer experimenta una transformación en la piel; la elasticidad, firmeza y la capacidad de regeneración epidérmica ya no es la misma y el rostro adquiere una piel madura.

Sin embargo, la edad no el único factor para que suceda el envejecimiento prematuro. Que claro está, no sólo se observa en el rostro, también en los hombros, el escote y por supuesto las manos.

En términos biológicos, la epidermis sufre un deterioro en su función protectora. La dermis y la hipodermis también provocan afecciones en la estructura de la piel.

¿Cómo es el proceso?
Con el transcurso de los años el metabolismo de las células dérmicas es más lento, es decir, ya no se sintetiza el colágeno como antes y por consecuencia la piel se vuelve flácida. Sin embargo, esto no significa que no se pueda seguir con una rutina de belleza habitual.

El objetivo está en cubrir las necesidades que nos exige la nueva piel para mantener las capas cutáneas en correcto estado.

Cambios morfológicos

A continuación describiremos de manera más específica los cambios que hay en tu piel.

Epidermis: disminuye la capacidad hidratante natural volviéndose seca y escamosa.
Unión dermoepidérmica: la cantidad de nutrientes que se comparten entre las distintas capas cutáneas se reduce.
Dermis: el colágeno se deteriora y no se sintetiza de la misma manera. De igual forma disminuye la irrigación sanguínea por la pérdida de vasos sanguíneos.
Hipodermis: el tejido adiposo se vuelve más delgado. Esta es la causa de la flacidez.
Apéndices cutáneos: las glándulas sebáceas y sudoríparas son menos activas en la secreción.
¿Tengo piel madura?
Las siguientes características son señal de que tu piel se ha vuelto madura:

Manchas seniles: se presentan particularmente en el dorso de las manos, antebrazos y rostro. Se caracterizan por un color parduzco y su tamaño puede ser desde milímetros a centímetros.
Verrugas seniles: son bultos benignos y pigmentados. Generalmente aparecen en zonas que son expuestas a la luz.
Pérdida de elasticidad: la piel se arruga y se cuelga.
Sequedad: se produce por la pérdida en la absorción de líquidos. Por ende, la piel tiene una apariencia áspera con fisuras tirantes que en ocasiones provocan picazón.

¿Cómo saber qué productos de belleza elegir?

Para un mejor resultado se recomienda acudir con un especialista en la piel antes de elegir cualquier cosmético o producto de belleza. Puesto que se deben analizar los signos de envejecimiento que muestra la piel, qué tan seca es, su pigmentación y ver si presenta arrugas profundas.

A continuación una lista de los productos cosméticos que debes usar:

Hidratante
Es indispensable recompensar la pérdida de líquidos con un hidratante, pues estos forman una capa protectora y evitan la sequedad. Tal es el caso del aceite de oliva, la silicona e inclusive la vaselina en pocas cantidades.

Humectante

Este producto tiene la capacidad de retener los líquidos por más tiempo. Se recomienda utilizar una crema hidratante de acuerdo a tu tipo de piel ya sea mixta, seca o grasa. Es importante que sea rica en vitamina E, puesto que elimina cicatrices, difumina las impurezas y protege de los rayos del sol.

Restauradores
Ceramidas: son moléculas que se encargan de facilitar la unión entre las células de la piel. Lo ideal es utilizar productos de origen vegetal que se obtienen del arroz, trigo y soja.
Lípidos: sustancias que tienen la función de rellenar la piel. Sobre todo los liposomas que contienen un vitamina E y F.
Análogos del Factor Hidratante Natural (FHN): se encuentran en el ácido pirrolidincarboxílico, urea, ácido láctico y lactato sódico, azúcares, alantoína, entre otros.
Por otra parte, en el mercado existen varias opciones que mejoran los síntomas de la edad, tales como:

Aceleradores de la síntesis del colágeno que reducen el aspecto de las arrugas.
Redensificadores del tejido conectivo que sirve para darle firmeza a la piel.
Estimuladores de la actividad celular, los cuales aceleran el metabolismo celular.
Olugopéptidos que son la nueva versión del retinol y aportan luminosidad y frescura a la piel.
Y bien, ¿cuándo empiezarás a consentir tu piel?