Recomiendan disfrutar platillos típicos de estas fechas pero sin exceso

Notimex. La especialista Yolanda Fabiola Márquez Sandoval recomendó disfrutar los platillos tradicionales de estas fechas pero sin excesos, ya que un porcentaje importante de la población aumenta entre dos y cinco kilos en promedio al término de las fiestas decembrinas.

En entrevista con Notimex, la académica titular del Centro Universitario de Ciencias de la Salud (CUCS) agregó que subir de peso en estas fechas responde a varias razones, entre ellas a que “generalmente tenemos más compromisos y reuniones sociales, lo cual origina que comamos extra en relación a lo que habitualmente hacemos”.

Manifestó que ya en la reunión o fiesta, “hay gran disponibilidad de alimentos y está como feo decir no a todo, por lo que queda como ese compromiso de comer un poco más de lo acostumbrado”. Explicó que los platillos de la gastronomía que caracteriza estas fechas tienen más ingredientes calóricos, “aunado a que no son días que motive mucho a hacer actividades físicas porque oscurece más temprano o porque hace más frío”.

La experta añadió que los compromisos sociales “nos impiden continuar con la rutina de actividad física que teníamos o el poder comenzar una actividad física puntual que contrarresta este consumo excesivo calórico derivado de diferentes alimentos”.

Comentó que sumado a esto las bebidas alcohólicas son más frecuentes en esta fechas, “están las típicas y las de tradición que están presentes en estas fiestas, que vienen a conjuntar estos factores para que a final de cuentas, en enero, un porcentaje de la población importante aumente entre dos y cinco kilos en promedio”.

Dijo que la culinaria mexicana a lo largo del país es diferente, pero entre los platillos más típicos está la bebida de ponche “que lleva varias frutas, azúcar, piloncillo y algunos hasta ‘piquete’, y se sirve con algunas semillas que contienen grasa como cacahuate o nuez”.

Mencionó que hay más alimentos fritos en aceite como los típicos buñuelos, “que en diferentes puntos de la República tienen varias formas pero la misma preparación con harina frita y al final es condimentada con azúcar y canela”.

“También hay platillos como puré de papá, que lleva crema y queso; las preparaciones de carne, pavo, pierna, lomo, mezcladas con algún tipo de salsa derivada de alguna oleaginosa como nuez, almendra, etcétera, que le da esa característica más calórica”, añadió. La también coordinadora del Doctorado de Ciencias de la Nutrición de la Universidad de Guadalajara (UdeG) expresó que depende la preparación, pero se estima que en estas fechas “se excede en promedio de 300 a 400 calorías en estos platillos tradicionales en relación a lo que habitualmente consumimos”.

“Los tiempos de comida se alargan, por ejemplo, en las posadas, en las cenas del 24 o del 31 de diciembre, hay una botana al principio, después ya está el plato fuerte y luego la sobremesa, ese transcurso de mayor duración del tiempo de comida pues hace que consumamos por más tiempo seguido”. Indicó que, además, se acostumbra obsequiar o recibir dulces, chocolates o galletas, “productos que en nuestra cultura son como un apapacho hacia la otra persona, por lo que por ende es difícil resistirnos a recibirlos, y se suman a lo que comemos en estos días”.

Puntualizó que también es común degustar del recalentado de estos platillos tradicionales. Márquez Sandoval precisó que de acuerdo a estudios españoles, estadunidenses e ingleses, suben más de peso los hombres que las mujeres en estas fechas, “porque por una tendencia de diferentes comportamientos durante el año ellas tienden a estar más pendientes de lo que comen”. Resaltó que los hombres se dan la libertad de comer más en estas fechas, “tienen un consumo más excesivo pero en enero, cuando deciden volver a su rutina habitual, suelen perder más fácilmente este sobrepeso, por lo cual se confían, ya que lo suben pero lo bajan más fácil”.

“Las mujeres siempre son como más cuidadosas, por lo que el exceso de peso que ganan en estas fechas es más limitado, por lo que las máximas cifras se reportan con los varones”, indicó. Detalló que personas de alrededor de 40 años es la población que sube más de peso en estas fechas, porque a medida que uno aumenta de edad es más difícil perder peso.

“Hay el rezago de que el año anterior ganaron unos cinco kilos, que les fue difícil quitárselos en el resto del año y llegan al siguiente diciembre con dos o tres de exceso del año anterior, que se suman a los de este año, y así acumulan peso entre más edad tengan”, comentó. La especialista agregó que los jóvenes pueden aumentar de peso en estas fiestas decembrinas pero lo bajan más fácilmente por su metabolismo y en enero responden más a actividades para recuperar su peso que tenían antes de diciembre.

El problema de ganar kilos, señaló, “es que no sea sólo en el periodo de diciembre y enero, sino que se sostenga esta ganancia de peso durante el año y que no se lo puedan quitar, por lo que este sobrepeso se acumula y sufrirán las consecuencias de la obesidad, como tener riesgos mayores a presentar diabetes, hipertensión, etcétera”. Afirmó que lo ideal es que no subieran tanto de peso en esta fechas, porque hay gente que tiene mayor predisposición que otras.

“El gran problema será la corrección, y en enero con la desesperación puedan caer en prácticas que sean aún más nocivas por quererse quitar de inmediato esta ganancia de peso con restricciones muy severas que al final de cuentas podrían dañar el organismo”, añadió.

“Al exterior, la persona podría parecer que no le pasa nada, pero internamente el llevar a extremos a nuestro organismo afecta el metabolismo, lo cual podría generar riesgos importantes cardiovasculares o el desencadenamiento a una diabetes”, estableció.

Por ello, Márquez Sandoval recomendó disfrutar las fechas pero sin excesos, “sin preparar y almacenar demasiada comida para que no quede para el recalentado, comer en las fechas que amerite pero sin caer en que en enero todavía sacan del congelador estos alimentos altos en calorías”. Invitó a la población a la reflexión, “si bien no hay que dejar nuestros platillos tradicionales de estas fechas, que son deliciosos, sí disfrutarlos de forma moderada”.

Aconsejó obsequiar otras cosas que no sean dulces, chocolates o galletas. Comentó que estas fechas tienen una esencia de convivencia, “de disfrutar a nuestros seres queridos, de cerrar bien el año para iniciar otro con nuevas metas y objetivos, pero sin salud qué podemos hacer, nuestra salud tiene un valor agregado que en estas fechas se pueden prevenir”.

Pidió hacer conciencia en estas fiestas decembrinas, “disfrutemos pero con moderación y llegar a enero con el mismo peso que teníamos antes de iniciar diciembre, sería una meta que nos daría satisfacción pare iniciar el año con mejor salud y bienestar”. “Si desde ahorita le invertimos a cuidarnos, seguramente los gastos para atender nuestra salud a futuro serán mucho menores”, concluyó.