Jóvenes y niños de retorno enfrentan situaciones difíciles para su educación  

Foto: Wilmer Zárate

Por: Wilmer Zárate.

Uno de los principales retos al que se enfrentan niños y jóvenes de retorno de Estados Unidos a México es el desconocimiento  del idioma español, cultura, adaptación, entre otras, de la misma manera los programas de estudio son distintos lo cual dificulta su reinserción, señaló Arturo Villaseñor, coordinador de Iniciativa Ciudadana Región Puebla.

En la presentación del Reporte Número 9 del Observatorio Ciudadano sobre Políticas Públicas para Migrantes-Puebla “Migración, Niñez y Juventud”, enfatizó la falta de políticas públicas y compromiso por parte de la autoridad para la atención de la población de retorno.

“Si bien el programa federal ha lanzado diferentes iniciativas como el Programa Binacional de Educación Migrante (PROBEM) y Educación sin Fronteras, realmente no ha habido continuidad de estos programas y no se han fortalecido las capacidades pedagógicas de los profesores a nivel de educación básica y media superior para atender a los migrantes retornados”, subrayó.

De acuerdo con las Políticas Publicas, Villaseñor compartió que no existe una base de datos de cuantos son los migrantes, ni sobre sus habilidades y necesidades, simplemente existe el programa pero no generan acciones de acompañamiento hacia la población.

Dentro del reporte que se realizó durante el año 2017 en la Escuela Bilingüe Niños Héroes de Chapultepec del Municipio de Nealtican, Puebla, donde académicos de la UDLAP y BUAP en conjunto de jóvenes prestadores de servicio social, participaron en dicho programa con la finalidad de trabajar de manera conjunta con la escuela y comunidad para el desarrollo de acompañamiento educativo hacia los niños y jóvenes migrantes.

“Se necesita un mayor ejercicio de acompañamiento curricular hacia los profesores, la vinculación con instituciones universitarias como la UDLAP, BUAP, IBERO, u otras universidades públicas y privadas de Puebla y a nivel nacional, deberían de empezar a trabajar con proyectos de formación, acompañamiento, fortalecimiento educativo hacia estas poblaciones al no contar con profesores de tiempo completo que dominen el inglés, náhuatl, español… Si debe de haber un ejercicio donde las universidades públicas y privadas en México incorporen proyectos de manera conjunta con las escuelas para fomentar este tipo de programas de complementarios educativos”, expresó.