Desconcierto en Imjuve ante falta de nombramiento del próximo titular

Redacción. Al exhortar a que no se elimine la perspectiva de juventud en el ejercicio de la administración pública federal, el Instituto Mexicano de la Juventud está alerta del posible nombramiento del nuevo gobierno, del titular de este órgano desconcentrado con autonomía técnica, por ahora vinculado a la Secretaría de Desarrollo Social que será transformada en Secretaría del Bienestar para el próximo régimen.

Con respecto al programa de Andrés Manuel López Obrador, “Los jóvenes construyendo el futuro”, con el que el nuevo gobierno garantizará el ingreso y becas de permanencia en la escuela o trabajo como aprendices con salarios que pagará la federación a los muchachos, el director de Salud, Equidad y Servicios a Jóvenes del Imjuve, Horacio Chavira confía en que en la futura administración del país “no se va a reducir el espectro de los jóvenes a personas que solo estudian o trabajan, porque ello significaría “reducir todas sus realidades”.

Al resaltar que el programa “Los jóvenes construyendo el futuro”, estará a cargo de Horacio Duarte desde la Secretaría del Trabajo, Chavira observó en la medida un posible riesgo de aislar al sector como sucedió en el pasado, cuando el Imjuve dependía de la Secretaría de Educación Pública (y solo atendía a los que estudiaban) o como cuando estaba bajo la jurisdicción de la Secretaría de Gobernación, “considerando que los jóvenes eran un riesgo político”.

Chavira destacó a los micrófonos de MVS Noticias, la importancia de que las políticas públicas destinadas al sector, “no sean visiones de los adultos, sino que sean los jóvenes quienes opinen qué es lo que hay que hacer con ellos”.

Se espera que “no sea el concepto de ‘Ninis’ —los que no estudian ni trabajan— el que atraviese las políticas públicas, se ignoraría la complejidad de lo que significa ser jóvenes” y “diluye la perspectiva de juventud” que ha logrado colocarse en las naciones de avanzada, entendiendo que a las juventudes ya se les reconocen un conjunto de derechos sociales, sin “reducir la condición juvenil a que ellas y ellos solo son productores económicos, que deben estudiar y ser útiles en el mercado”, explicó Chavira.

Hoy en día, alertó el juvenólogo “es un gran reto hablar de juventudes, hay 38.7 millones de mexicanos entre los 12 y los 29 años de edad y el 40% de ellos viven en pobreza con al menos dos carencias en su hogar, como falta de drenaje, agua y hasta luz; tampoco tienen acceso a seguridad social y servicios de salud muchos de ellos no tienen ni la primaria terminada y tampoco tienen acceso a una canasta básica de alimentos.

Asimismo, están en condición de pobreza extrema 3 millones de mexicanos entre los 12 y los 29 años; representan el 7% de los jóvenes del país, y les falta “casi todo lo anterior”, agregó.

“Si el Imjuve deja de tener relevancia, no habrá una institución que garantice una perspectiva de juventud en todos los ámbitos de la administración pública, resaltó Chavira al señalar que en el Imjuve “no ha iniciado el proceso de transición”.

El Imjuve es un órgano desconcentrado con autonomía técnica y por estatuto, explicó Chavira, “aunque puede haber cambios y se respetarán con el nuevo gobierno, la designación del titular del Imjuve es una designación presidencial; la Sedesol debe ratificar el nombramiento y cualquier cambio en la dependencia tendrá que partir de finales de 2018 o en el 2019 desde el Congreso de la Unión que —si así se dispone— deberá modificar la ley; porque el Instituto Mexicano de la Juventud se creó en 1997 con su propia ley, la del Imjuve. Para desmantelarlo, cambiar cualquier estatuto o cualquier reglamentación del Imjuve se requiere de algún proceso legislativo y además de la ratificación por parte del presidente en turno. Asimismo, se necesitan ajustes en las leyes del Programa de Egresos de la Federación que ya fue entregado en el mes de julio como se recordará, se entrega con un año de anticipación y en esta área, cualquier modificación institucional requiere pasar por el presupuesto y la Secretaría de hacienda el congreso y sus dos Cámaras y en este caso y la voluntad que tenga el próximo presidente de México.

Finalmente, Chavira resaltó que en 2025 se cerrará el bono demográfico de juventud y el reto de este sexenio implica invertir en los jóvenes porque a mitad de la próxima década, México entrará en un proceso de envejecimiento.

La próxima semana el Imjuve planteará estas y otras reflexiones en un foro internacional a desarrollarse en Acapulco, Guerrero.

(Con información de MVS Noticias)