La Basílica de la Soledad “Corazón espiritual de Oaxaca”

Foto: Omar Sánchez Chávez

Por: Omar Sánchez Chávez

Oaxaca de Juárez. A los pies del cerro del Fortín donde se encuentra el Auditorio Guelaguetza, se yergue un imponente templo de cantera labrado por manos oaxaqueñas, su belleza es única e incita a observarlo detalladamente, apreciando imágenes religiosas que nacen de la piedra pulida.

La Basílica de Nuestra Señora de la Soledad, tiene mucho significado para el pueblo de Oaxaca, ya que posee el título de “patrona de la capital”. La construcción del templo se inició en 1682 y se terminó en 1718. La portada del templo está integrada por tres cuerpos con columnas tritóstilas, con un vano central, con arco de medio punto y tiene una altura de 24 metros. De estilo barroco exuberante y que representa lo que se conoce como “El Barroco Oaxaqueño”.

Entrando por la puerta principal, inmediatamente a mano derecha, encontrará la piedra donde nacía el agua

Foto: Omar Sánchez Chávez

y que según la leyenda, le da origen al templo; protegida por una verja de hierro fundido de excelente manufactura.

El coro cuenta con un bellísimo órgano del Siglo XVIII. En el presbiterio podemos observar a la Virgen Patrona de Oaxaca y Señora del Templo, a sus costados se aprecian pinturas del Siglo XVIII dedicadas a San Pedro, San Pablo, San Agustín, San Jerónimo, Santa Teresa, San Benito Abad, Santa Catalina y de la Magdalena.

Esta majestuosa obra dedicada a la Virgen de la Soledad, muestra el gran sentimiento que envuelve al pueblo oaxaqueño, que no escatima en gastos para festejar a sus santos; realizando calendas, bailes, comida, música de viento, quema de juegos pirotécnicos y la calidez de este pueblo sureño.