Huejotzingo vuelve a sorprender con su Carnaval

Foto: Omar Sánchez Chávez

Por: Omar Sánchez Chávez

Huejotzingo. Como ya es costumbre, este martes concluyó la tradicional fiesta de la carne, donde se sintió la algarabía, la alegría, el amor por las tradiciones y el patriotismo en una región que sabe moverse a ritmo de carnaval.

Los habitantes de Huejotzingo llevan en la sangre la pasión por su festividad más grande, no escatiman gastos en vestimentas, comida y bebida, es fácil percatarnos del orgullo con que portan sus indumentarias, las cuales son coloridas, originales, hermosas que muestran el arduo trabajo con que las confeccionan.

El alcohol para bien o para mal, juega un elemento importante en la festividad de la carne, ya que

Foto: Omar Sánchez Chávez

los danzantes se muestran más eufóricos, felices, alegres y apasionados a la hora de bailar y detonar sus mosquetones que lanzan un ruido estruendoso y que provoca miedo entre los ajenos a su práctica.

Las costumbres siempre juegan un papel importante dentro de Huejotzingo, al recorrer sus calles y barrios, en ciertos puntos se alzan carpas donde suena una banda de viento, ahí observamos a danzantes detonar sus escopetones, quienes además se nutren de su gastronomía local, bailan solos o abrazados de sus esposas e hijos, una tradición bella que se inicia desde muy pequeño, es fácil ver a niños detonar sus escopetones con valentía y orgullo.

Foto: Omar Sánchez Chávez

Vemos un sinfín de batallones recorrer las calles principales de la ciudad, cada grupo tiene una vestimenta especial, vemos por ejemplo a los “zacapoaxtlecas” que representan a los indígenas de la Sierra Norte poblana, que hace años muchos de ellos murieron por la patria en la batalla de 5 de Mayo. Los demás batallones lo componen los “franceses”, los “zuavos”, “zapadores” y “turcos”.

Todos los danzantes detonan sus mosquetones y después saltan, brincan para sentir esa excitación que provoca la pólvora al ser quemada acompañada de un ruido ensordecedor que hace vibrar el corazón.

De esta forma, concluye una fiesta donde se pueden observar a más de 15 mil danzantes que son observados por alrededor de 20 mil personas que son bañadas por pólvora de este carnaval considerado el más grande de Puebla.