Notimex. Si algo disfruta Guillermo del Toro es dirigir películas y llevar a la pantalla los mundos surgidos de su imaginación, sin embargo, cuando descubre a un cineasta con talento, no duda en asumir el rol de productor o “guarura” para apoyar y defender un proyecto de calidad.
Tal fue el caso del filme de animación “El libro de la vida”, ópera prima de mexicano Jorge R. Gutiérrez, producido por Del Toro, el cual se estrena este jueves en más de dos mil pantallas de cine de todo el país.
En entrevista con Notimex, el director de filmes como “El laberinto del fauno” y “Hellboy” explicó que el papel del productor no es nada sencillo, pues es necesario defender el proyecto, pelearte con el estudio, “es un trabajo muy intenso y el público sabe que estás involucrado y cargas con eso para siempre”.
Para Del Toro no resulta gozoso el trabajo del productor, confiesa que le gusta más dirigir, aunque en su fructífera trayectoria que inició en 1985 con el cortometraje “Doña Lupe” ha producido alrededor de 36 proyectos, una veintena más de los que ha dirigido.
Al decidir cuales son los trabajos en los que desea involucrarse, “El gordo” como le dicen sus amigos, no duda en convertirse en una especie de “guarura”, porque considera que hacer una película es como introducirse en una jungla sin ninguna protección.
“Yo me involucro en las películas que necesitan una especie de guarura, yo vi el arte que presenta Jorge (Gutiérrez) y sentí su energía y literalmente se me hizo un hueco en el estómago que me decía que si no entraba yo a apoyarlo iban a destruir su trabajo, o no se iba a hacer”, expresó.
Agradecido con su trayectoria y con el apoyo de productores como Bertha Navarro, quien lo apoyó en su filme “Cronos” (1993), ahora Guillermo del Toro asegura que desea devolver un poco de lo que le han dado, “a los directores que he apoyado les he pedido hagan lo mismo, aunque muchos no lo hacen”.
A Jorge Gutiérrez, Del Toro lo describe como “un genio de la animación, es un genuino creador visual con muchas ambiciones y eso es lo que me convenció, además de que en su película rinde homenaje a la tradición del Día de Muertos, una festividad muy especial para mí”.
En su oportunidad, Jorge R. Gutiérrez agradeció a Del Toro por hacer realidad el sueño de dirigir su primera película, un proyecto que inició hace 14 años y que tiene que ver con las costumbres mexicanas, con el Día de Muertos y con el mensaje de que las personas deben defender lo que desea ser en la vida.
“La primera vez que vi la película terminada lloré como media hora, recordé a mis amigos, a mi abuelo, a todos los que me acompañaron a lo largo de casi 15 años que me llevó concluir este sueño, de niño siempre soñé hacer una película y ahora que ha pasado es algo que no puedo explicar”, expresó el cineasta.
Destacó que el apoyo de Guillermo del Toro fue incondicional, “estuvo al pendiente de todo, literalmente se metió hasta la cocina y es algo que agradezco infinitamente, fue una relación muy bonita, hasta ahora no conozco a otro cineasta que se comprometa con un proyecto como él lo hace”.
“El libro de la vida” cuenta la historia de “Manolo”, quien desde niño descubre su pasión por la música aunque la tradición familiar le dicta ser torero, así que debe defender tanto su sueño de ser cantante como su amor por “María”, quien también es pretendida por “Joaquín”.
En el filme participan los actores Diego Luna, Sandra Echeverría, Ana de la Reguera y Kate del Castillo, entre otros, quienes dan voz a los personajes principales.
No Comments
Comments for Guillermo del Toro, un ‘guarura’ de jóvenes cineastas are now closed.