Sigue causando indignación en los ciudadanos el Distribuidor Vial Cholula

Foto: Omar Sánchez Chávez

Por: Omar Sánchez Chávez

San Andrés Cholula. El distribuidor vial Cholula que fue inaugurado a finales del mes de octubre del año pasado y que tuvo una inversión de 220 millones pesos, sigue causando enojo y descontento entre los ciudadanos de San Pedro y San Andrés Cholula, debido a que califican la obra como “inservible”, ya que no solucionó los problemas de tráfico que ahí se generan.

En ese tenor, especialistas como la antropóloga Ana María Ashwell en repetidas ocasiones ha denunciado que el proyecto es algo que “agrede” y “atenta” contra la cultura de los barrios de este Pueblo Mágico, además que afecta el paisaje de la Gran Pirámide de Cholula, por su cercanía.

“El puente es una de las cosas más terribles y agresivas que le han pasado al patrimonio cultural de Cholula, fue un costo de destrucción arqueológica enorme a 500 metros de la pirámide”, dijo indignada la antropóloga.

Algunos usuarios de la red social Twitter, denuncian que el nuevo puente atirantado únicamente generó “más tráfico, contaminación y estrés”.

“La gran mentira de @RafaGobernador que el distribuidor vial Cholula serviría para desahogar el tráfico”, cita una usuaria de nombre Maru Ocampo en Twitter.

Por su parte, el delegado presidente del PRI de San Andrés Cholula, Raymundo Cuautli Martínez aseveró que el puente fue una obra inservible, ya que los días viernes y sábados se genera un embotellamiento en la parte baja del inmueble, lo cual dificulta la entra a San Pedro como a San Andrés Cholula.

“Una obra que no fue bien planeada en la cual se gastaron más de 200 millones de pesos, cuando tenemos vialidades y otro tipo de necesidades en el municipio, que eran prioritarias y ese es el problema que no se priorizan las obras”, concluyó.

Cabe señalar, que cuando se realizaban las obras del distribuidor, se encontraron 12 entierros prehispánicos, un cráneo de un posible guerrero jaguar, así como vasijas de barro, material arqueológico que fue resguardado por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).