Notimex. La inocencia, la imaginación y la ilusión del legado de las canciones del compositor Francisco Gabilondo Soler “Cri-Cri” fueron inyectadas de nueva vida con el espectáculo creado por la hija del fallecido autor, Andrea Gabilondo, “Tiliches, Tambaches y Cachivaches”, el cual se presentó en el Teatro Metropólitan.
El sonido del piano dio inicio a un viaje casi fantástico en donde una escenografía blanca daba origen a los personajes más extraños y diversos, quienes recrearon los temas de Francisco Gabilondo Soler “Cri-Cri”, en un relato lleno de música, videos y diálogos.
Con música de Alan Ahued en temas como “La marcha de las canicas” o de Reyes Magos y Eduardo López Ochoa en canciones como “Che araña”, el público compuesto por adultos y niños de todas las edades siguieron el camino de un compositor perdido en sus ideas que abrían la puerta a números musicales protagonizados por viejos, bailarines de negro con peinados exóticos y cantos.
Durante el espectáculo se recordaron canciones emblemáticas como “El chorrito” o “La marcha de las letras”, esta última emocionó a la audiencia que aplaudió siguiendo la melodía infantil.
Personajes como “El ratón vaquero” y “La muñeca fea” se unieron al viaje del compositor que se topó con melodías como “La cotorra viajera” con música de Oswaldo Flores y sonidos de un tren en medio de las voces.
Mediante un video, la actriz Susana Zabaleta hizo una participación especial donde disfrazada ad hoc del tema “Sirenas” regaló su voz a los espectadores que también escucharon la interpretación original de “Cri-Cri” en temas como “El rey bombón”.
Haciendo alusión al programa de radio de “Cri-Cri” en la XEW el “show” que cuenta con las actuaciones de Enrique Chi, Cecilia Cantú, Alejandro Scarpatti, José Roberto Pisano, Irene Repeto, Jessica Luna, Guiliana Vega, Domingo Rubio, Balam Sosa, Felio Eliel y Manuel Ballesteros y que contó con música en vivo, ofreció una nueva versión de temas como “Orquesta de animales” e incluso hizo llamar, a través de un canto al icónico “Grillito cantor”.
“Tiliches, tambaches y cachivaches” concluyó entre aplausos con un porpurrí de temas como “La patita”, “Caminito de la escuela”, “Negrito bailarín” y “El comal y la olla” producto de la participación de creadores en áreas como arreglos musicales del Centro de Investigación y estudios de la música (CEM), así como de la coreógrafa Coral Zayas y la producción de Rossy Pérez.
Al finalizar la función, la cantante Susana Zabaleta dio su opinión sobre el show: “Creo que las ideas de Cri-Cri son padres, es un espectáculo padre, le falta ritmo pero ahí va”, señaló.
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