Cuando una empresa lanza una oferta pública de acciones, se dice que la compañía se graduó.
No más rondas de financiamiento entre inversionistas privados, no más problemas de falta de capital, no más ser considerados unos chicos jugando con computadoras en un garaje.
Pero cuando se piensa en Facebook, ninguna de esas ideas convencionales parece amoldarse a la empresa.
La red social es exitosa. Cuenta con ganancias, una fuerte base de usuarios, prestigio y una mina de oro de información personal.
Entonces, ¿qué busca en la bolsa de valores?
En estos días la red social más grande del mundo -que basa su poder en la información de 800 millones de usuarios- presentará ante la Comisión de Valores de Estados Unidos una solicitud para vender públicamente parte de sus acciones.
Se espera que ofrezca un 10% de la compañía y que recaude entre US$7.500 y US$10.000 millones, lo que situaría el valor de la empresa entre US$75.000 y US$100.000 millones.
De cualquier modo -como ocurre con muchas otras ofertas públicas en la bolsa- es probable que el precio inicial de las acciones sea muy inferior al que se venda en un par de meses cuando comiencen las transacciones.
Su oferta disparará comparaciones con aquella que Google lanzó en 2004. La apuesta del buscador valuó la empresa 67 veces más que sus ganancias de la época y mostró ser un éxito desde entonces. Google no ha parado de obtener ganancias y se encuentra entre las 10 empresas tecnológicas más importantes de Estados Unidos.
Otras, sin embargo, no han corrido con tan buena fortuna.
En los últimos meses empresas como Groupon -dedicada a vender cupones de descuento en la red- o Zynga -detrás de juegos como Farmville en Facebook- han tenido problemas tras apostar por salir a la bolsa.
En ambos casos, los inversionistas han llamado la atención sobre descuidos en sus finanzas, lo que las ha obligado a rehacer en más de una ocasión el estado financiero que acompaña el informe.
Facebook tendrá que mirar ambos espejos si espera tener éxito.
Por un lado la principal diferencia que tiene con Google es el modelo de negocio. El buscador apostó por la publicidad desde un principio y ha mostrado que ese es un negocio viable que puede seguir explotando por años.
Para Facebook la cosa no es tan sencilla. Sus usuarios no suelen ver con buenos ojos la publicidad en el sitio, que sienten como una intromisión. La red social ha experimentado en el pasado con “rastrear” a sus usuarios en otros sitios asociados y después mostrarles publicidad relacionada dentro de sus paredes digitales.
El resultado ha sido un alud de quejas que han obligado a la compañía a cancelar el experimento.
Por supuesto la gran mina de la red social es la información y los hábitos personales de 800 millones de personas. Pero el tema de la privacidad es tan sensible, que cualquier intento por capitalizar dicha información será controversial.
Y al salir a la bolsa, sus finanzas, estados de cuenta y decisiones serán mucho más vigilados que lo que eran hasta ahora. Habrá más golpes y la empresa tendrá que sortearlos.
La red social está intentando que los internautas la conviertan en su página de inicio y pasen en ella una gran cantidad de tiempo. Así espera atraer más acuerdos con empresas comerciales que provean servicios a sus usuarios, a cambio de una tajada del pastel.
Ese modelo es el que más ganancias les ha reportado hasta ahora y uno con el que esperan seguir experimentando.
Pero si los usuarios empiezan a pasar menos tiempo en sus muros, el modelo podría tambalearse.
Estadísticas de la empresa de análisis de internet comScore, indican que en países desarrollados como EE.UU. o Reino Unido, las visitas a Facebook han decaído en los últimos tres meses.
En regiones como Latinoamérica o India, sin embargo, continúan al alza.
Pero ¿la caída en mercados maduros significa que Facebook corre el riesgo de golpear el techo y detener su crecimiento? Es probable que Mark Zuckerberg ya haya pensado en eso y esté tratando de evitarlo.
Aunque su futuro está lejos de estar garantizado, parece que Facebook estará aquí por un buen rato.
Cuando más de 600 millones de personas de todo el mundo se conectan en una misma plataforma, el concepto de red social para mantener al día a los contactos evoluciona para algo mucho mayor.
Hay quien cree que Facebook se convertirá en el mayor banco del mundo, otros creen que servirá para mejorar las relaciones políticas entre países, otros que afectará a la economía internacional dentro de pocos años…
Sea como sea no hay duda de que estamos hablando de una “Internet paralela”. Muchas pequeñas empresas han decidido dejar de crear un sitio web para crear una página en Facebook, donde tienen una plataforma gratuita en la que pueden entrar en contacto con sus clientes, mostrar actualizaciones del negocio, presentar negocios, etc. eso sólo es un ejemplo de como Facebook está cambiando la forma de “hacer las cosas” en internet.
Para tratar sobre este y otros asuntos relacionados con el futuro de Facebook, grandes profesionales del sector están creando el proyecto The Future of Facebook, con entrevistas y discusiones que podemos ver en Quora, claro, el mejor sitio para discutir este tipo de temas en nuestros días.
The Future of Facebook necesita financiación para su realización, motivo por el cual se encuentra en kickstarter, uno de los mayores proyectos de Crowdfunding del momento.
¿Facebook se convierta en una plataforma en internet?
Emma Barret de The Telegraph visitó las oficinas de Facebook y cuenta qué pasa dentro del edificio de Palo Alto, California. Ella describe que algunos cables cuelgan del techo, los pisos están desgastados, no tienen adornos y una especie de grúa se sitúa en el centro de las numerosas cocinas en la oficina, dando al lugar un toque casual pero enérgico.
También existe una norma estricta que dice que debe haber un desarrollador trabajando en el sitio por cada millón de usuarios.
En el vestíbulo también hay una pantalla que muestra una imagen en movimiento del mundo en el que aparecen arcos blancos cada vez que se realiza una conexión entre ‘amigos’ en el sitio. Los datos aparecen cada 10 segundos, y se crean nuevos arcos que aparecen a cada instante.
Mark Zuckerberg, de 27 años de edad, fundador y director ejecutivo de Facebook, cuenta con un escritorio en la oficina de planta abierta entre los principales desarrolladores, pero los visitantes son cuidadosamente dirigidos lejos de su espacio.
Sobre el futuro de la red social, Barret concluye que el plan es que Facebook se convierta en una plataforma en internet, en lugar de ser solamente un sitio web. Así evitarán lo que le pasó a MySpace, quienes se quedaron como sitio y hace mucho que el servicio ha dejado de crecer.
¿Qué podemos esperar de Facebook en el futuro?
Si tenemos en cuenta que en el año 2005 no existía Facebook y que en 2006 se consolidaba como una red cuyo principal objetivo era mantener activas las relaciones sociales de las personas, comprenderemos lo complejo que resulta augurar el futuro de la red social.
Lejos de su objetivo primigenio, las fortalezas en torno al desarrollo seguido por la red social, la consolidan hoy como un punto de encuentro para el Business, personas y profesionales al servicio de los negocios y la red social como el nuevo World Trade Center virtual.
El futuro siempre es incierto y aunque esto pueda parecer una obviedad, no lo es tanto, pensemos que la evolución y el desarrollo desde aquella Web de datos o Web 1.0 ha sido vertiginosa y únicamente se ha logrado gracias a que son las personas y su naturaleza única las que han ido aportando novedades al que hoy ya se ha consolidado como el nuevo modelo de negocios y la plataforma donde se produce el devenir del nuevo orden social.
Y si bien es cierto que conocemos aspectos inherentes al futuro de los social media de la mano de las aplicaciones para dispositivos móviles que proliferan en el objetivo primordial de mimetizar las fortalezas de los seres humanos con las de la tecnología, es bien cierto que el cambio de modelo de negocios ha llevado a un ciclo en el que el principal objetivo radica en fusionar a todos los intervinientes.
Los desarrolladores de aplicaciones conocen de primera mano y gracias a la generación de nuevas necesidades lograda por las distintas aristas del nuevo marketing, se produce con el total conocimiento de los clientes a los que van destinados, al fin y al cabo, el objetivo final es la satisfacción de los consumidores.
Lo que se denomina futuro de las redes sociales o más habitualmente como futuro de Facebook, no es tan lejano. Pensemos que en el momento actual, un estudio llevado a cabo por el Ministerio de educación en Estados Unidos, rebeló que todos los modelos educativos están incluyendo las aplicaciones para dispositivos móviles entre sus productos, ya existen apps que ayudan a los niños a aprender a leer y adquirir un vocabulario más extenso e incluso, existen aplicaciones que favorecen el desarrollo de habilites para niños autistas o con síndrome de asperger.
Y si los modelos educativos han cambiado tras la llegada de las redes sociales haciendo de estos una relación bidireccional basada en la interacción y el diálogo, es más que evidente que las aplicaciones de Facebook en el campo de la educación son ya hoy, una realidad para las nuevas generaciones.
Generaciones de profesionales 100% tecnológicos que están más preparados que sus superiores; analógicos o en su defecto, mixtos.
Sin embargo, la educación no es el único ítem que se ha visto influenciado por el efecto de las redes sociales, negocios, turismo y salud, son algunos de os campos de acción para los que la Web 2.0 y obviamente, la Web 3.0, han sido grandes exponentes.
Así nos enfrentamos a un futuro que podemos aventurar; publicidad híper segmentada y localizada, avances de relevancia en el mundo de la medicina y específicamente en la puesta en marcha de nuevos procesos tendentes a aumentar la calidad de vida, un mundo aún por descubrir que únicamente depende de la innovación y creatividad de los aproximadamente 14 millones de personas que centran su actividad en el desarrollo de aplicaciones móviles.
El Facebook del futuro, no sólo negocios
Si bien es cierto que son cada vez más las empresas que han encontrado en Facebook la plataforma idónea para relacionarse con su público objetivos, la máxima eficiencia en relación a la captación de nuevos clientes se ha logrado gracias a la evolución y desarrollo de los preceptos sobre los que hoy se asienta el SMM, social media marketing, una pérdida de dinero y recursos para muchos, y sin duda un aspecto imprescindible para lograr un aumento en las cifras finales de ventas para otros, gracias a la integración de aplicaciones que fomentan la compra- venta de bienes y servicios desde la propia red social, todo ello sin olvidar que está en fase de desarrollo y estudio una aplicación que permitirá realizar transferencias de fondos desde Facebook consolidando a la red social como líder indiscutible del e-commerce.
Integración y Matrix, una adicción insustituible e irremplazable
No es posible en definitiva, imaginar un futuro sin Facebook, la red social ha logrado la conectividad global de los usuarios a su Matrix creando además, una acción no sólo por el emprendimiento sino por la conectividad permanente.
Es por este motivo que cualquier pronostico de hoy se quedará corto para mañana, lo más importante, es tener la certeza que ni Facebook, ni Twitter, ni Google, conocen con certeza el futuro de la tecnología, pero el grado de eficiencia y sobre todo, el grado de exaltación de valores intrínsecos a la raza humana olvidados durante la era de la especulación y la impunidad, dan como resultado civilizaciones desarrolladas, más comprometidas y mucho más creativas que lograrán seguro, salvar viejos obstáculos que han impedido durante generaciones dar un paso mas en la escala evolutiva… hoy las personas somos las ratas de laboratorio de la tecnología y experimentar de forma constante, es la única forma de poder analizar el futuro… incluso, antes que se convierta en presente.
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