PAN en el Senado asegura que ‘los demonios están sueltos’ en la deuda pública

Agencias. “Los demonios están sueltos”, así lo advirtió el vicecoordinador económico de la bancada del PAN en el Senado, Francisco Búrquez Valenzuela, quien destacó que nuestro país enfrenta un proceso de endeudamiento desbocado no sólo en los municipios y en los estados, sino también en la Federación.

En entrevista con Noticias MVS, el legislador panista detalló que en 2012 el gobierno del presidente Enrique Peña Nieto recibió una deuda pública inferior a 5.9 billones de pesos, cifra que hoy se ha disparado a más de 8 billones, lo que representa el 47 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB).

Señaló, en este sentido, que la deuda pública por cada trabajador mexicano es de más de 160 mil pesos, mientras que cada niño que nace en la actualidad ya debe más de 70 mil pesos de deuda pública.

Francisco Búrquez afirmó que el gobierno no tiene ya control de la deuda pública y advirtió que, de seguir con la tendencia que se ha seguido hasta ahora, los niveles de endeudamiento podrían  llegar a representar el 60 por ciento del PIB para cando finalice el sexenio (2018) e incluso el 90 por ciento en 2030.

Ante esta situación, afirmó que es necesario que se actúe de manera responsable, se prohíba el endeudamiento en la Federación, en los estados y municipios, pero también se castigue a los servidores públicos que endeuden a los ciudadanos, como lo plantea una iniciativa del PAN presentada en la Cámara Alta en octubre pasado.

Cabe señalar que la iniciativa presentada por el propio senador Francisco Búrquez establece que el Estado no podrá contraer directa o indirectamente obligaciones o empréstitos de ningún tipo, además de que no se podrán imponer impuestos arbitrarios ni de carácter confiscatorio.

Además, prevé que el Congreso de la Unión establecerá las leyes en materia de responsabilidades, los tipos penales y sanciones para los servidores públicos que endeuden al Estado.

La propuesta, que reforma los artículos 25, 73 y 117 de la Constitución, se turnó a la Cámara de Diputados para su análisis.