En Sonora estiman pesca de 30 mil toneladas de aguamala

Notimex. La temporada de pesca de aguamala o medusa bola de cañón en la zona ribereña de Sonora podría generar una producción de unas 30 mil toneladas, que en su totalidad se destinarán a la exportación al mercado asiático.

El subsecretario de Pesca y Acuacultura del gobierno de Sonora, Marco Antonio Ross Guerrero, señaló en entrevista para Notimex que esta pesquería es de alto volumen y representa una opción para los pescadores de la entidad, al concluir la captura de camarón.

Mencionó que la producción de aguamala en los litorales de Sonora el año pasado alcanzó las 30 mil toneladas y ese mismo volumen de producción se ha estimado para la temporada que está iniciando.

Como alternativa emergente, comentó, esta pesquería que se realiza desde Puerto Peñasco, en el noroeste del estado, hasta la Bahía de Agiabampo en el sur de la entidad, representa una derrama económica de unos 200 millones de pesos para mil 500 pescadores.

Precisó que la pesca de la bola de cañón se concentra en la zona de Guaymas, al sur del estado, donde se presenta una “corrida” de este recurso, “no se ha encontrado la zona exacta de dónde nacen las medusas, se infiere que está en la región de Guaymas”.

Indicó que esa es la región más productiva de este recurso y una vez que nace la medusa, esta camina y se mueve a través de las corrientes hacia diversos lados.

El funcionario estatal comentó que Sonora es el principal estado productor del país de esta pesquería.

Refirió que el principal mercado de la aguamala es China, a donde la medusa se envía una vez que se deshidrata y allá se le da diversos usos, que van desde el consumo humano, hasta la industria farmacéutica y cosmetológica.

Investigadores del Instituto Nacional de Pesca (Inapesca), establecieron el 24 de marzo como inicio de temporada para la captura de la medusa bola de cañón o aguamala, considerando que aún no se encuentra en sus tamaños óptimos comerciales, dijo.

Ross Guerrero expuso que la pesca de este recurso es muy rápida y por ello la temporada es muy corta, pues dura en promedio un mes, por lo que se está buscando con los involucrados en la actividad para hacer un aprovechamiento un poco más largo.

Asimismo, mencionó, se busca la manera de agregarle valor a este recurso marino, pues prácticamente se comercializa inmediatamente después de la captura, una vez que se somete a deshidratación mediante un tratamiento especial en tinas.