Senado crea comisión por Nochixtlán

Congreso de la UniónAgencias. La Comisión Permanente del Congreso de la Unión condenó los hechos violentos ocurridos en el municipio de Nochixtlán, Oaxaca, el pasado fin de semana y creó una Comisión de Seguimiento a las investigaciones, la cual podrá citar a reunión de trabajo a los servidores públicos que considere para aclarar los hechos.

Asimismo pidió un informe detallado a las autoridades correspondientes sobre la forma en que se llevaron a cabo los hechos de violencia entre policías federales e integrantes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE).

Lo anterior, luego de que la mayoría del PRI y el PVEM votaron en contra de citar a comparecer ante el Pleno de la Permanente y a Reuniones de trabajo a los secretarios de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong; de Educación Pública, Aurelio Nuño; del Comisionado Nacional de Seguridad Pública, Renato Sales y el gobernador de Oaxaca, Gabino Cué.

La vicecoordinadora perredista, Dolores Padierna, propuso un punto de acuerdo para exigir el cese de operativos que conlleven agresiones directas o detenciones en contra del magisterio y la población que les apoya por parte de los gobiernos federal y estatal; además de convocar al titular de Gobernación a comparecer ante el Pleno para informar sobre la estrategia para atender la crisis social en Oaxaca y las medidas tomadas para detener la criminalización de la protesta social.

Por su parte, el presidente de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, Luis Raúl González Pérez, informó que han solicitado a las autoridades estatales y federales los informes correspondientes de los mandos que participaron en el enfrentamiento de Nochixtlán, con el fin de deslindar responsabilidades y saber cómo se dio la participación de las autoridades, “confirmar si iban o no armados, en qué momento tuvieron esa intervención, y si siguieron los protocolos para el uso de armas”.

Al respecto, el presidente del Senado,Senado crea comisión por Nochixtlán, consideró necesario que la CNTE se deslinde o despeje la duda de que existen personas infiltradas en sus filas, toda vez que no le conviene ni a su propio movimiento, ni a la legitimación de su condición política con la que pretende conseguir algunos objetivos.