Por: Carlos Muñoz.
Las negociaciones con la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) continúan y el Gobierno Federal no afloja, sin embargo, lo que sigue siendo imperdonable son los famosos bloqueos, donde hoy le toca a Oaxaca vivir este martirio con tal de cumplir decenas de caprichos, en un estado donde recientemente ganó la gubernatura el PRI.
350 pesos es la cuota que pide la CNTE por dejar pasar a un automovilista a los alrededores del estado de Oaxaca, situación que molesta, que indigna y que curiosamente se hace a la espera de una temporada vacacional, cuando miles de niños esperan continuar con sus clases en el estado.
Cierto es que la Reforma Educativa fue lanzada con “bombo y platillo” por parte del Gobierno de Peña Nieto, lo peor es que la CNTE sigue llorando, siguen sin aceptarla y es que como ha dicho el Presidente “Ninguna reforma debe negociarse”. La pregunta es ¿qué hace la CNTE para mejorar la educación en México? ¿bajo qué argumentos desean echar atrás la Reforma Educativa cuando más del 55 por ciento de la sociedad ahora está en contra de estos “manifestantes”?
Oaxaca y Chiapas sufren por la falta de distribución de productos, combustible y demás, la sociedad ha sido duramente golpeada con estos bloqueos, es cierto que existe un derecho de libertad de expresión, lo que es imperdonable es que afectes de esa forma los intereses de las empresas particulares, extranjeras, sociedad en general y gobierno, mientras la solución luce cada vez más lejana, es decir, una total incoherencia de la CNTE.
En un mar de complicaciones, una de las voces para definir el futuro de esta historia la tiene el señor Miguel Ángel Osorio Chong, donde simple y sencillamente debe actuar como secretario de gobernación y no bajar el dedo del renglón en la aplicación de la Reforma Educativa, la cual aplica en todo el territorio nacional, guste o no y sin defender los intereses del actual gobierno.
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