Redacción. Para Michel Franco, los personajes de sus películas van más allá de entes que entrelazan vidas y dan sentido a una historia. Son seres capaces de reflejar fielmente las angustias, deseos, represiones y amores de aquellos espectadores que se ven a sí mismos en la pantalla, idénticos en emociones, pero de nombre y rostro distinto.
Es por eso que Michel Franco no se considera un cineasta mexicano que vende la originalidad en sus historias, prefiere replantear y mostrar desde diferentes perspectivas la forma en cómo cada persona enfrenta los conflictos y oportunidades al igual que “Las hijas de abril”, su más reciente película, ganadora del certamen “Una cierta mirada” en el pasado Festival de Cannes.
En este filme, el directo expone la vida de “Valeria”, una joven de 17 de años que, al quedar embarazada, tendrá que reactivar la relación con su madre (Emma Suárez, “Julieta” de Pedro Almodóvar) y sus hermanas.
El filme, que llegará a la cartelera mexicana el próximo 23 de junio, es una historia que no pretende juzgar ni trivializar el que una menor de edad esté embarazada, pero sí ofrecer diversas lecturas de cómo una familia, como cualquier otra, se enfrenta de una situación igual o similar; en especial, cuando la maternidad siempre ha sido una figura ausente.
“Es una adolecente embarazada, algo muy común en nuestro país, que se le vienen adversidades; es una difícil situación a pesar de que quiere tener al bebé de su novio que también tiene 17 años. “Abril” —la mamá— trata de ayudar pero también ocasiona más problemas porque es una mujer con muchos huecos emocionales, compite con sus hijas, no quiere aceptar que ya no es joven”, explica Michel Franco, al añadir que si bien la película se enfoca en el drama y prejuicios de cada persona, evita en todo momento que el argumento de sus protagonizas predispongan moral y éticamente al espectador.
“Le doy voz a ‘Valeria’, que está embarazada, no la juzgo en decir si está bien o mal; sólo hablo de lo difícil de su situación, resalto que ella quiere ser madre. La película no emite juicios, cada espectador podrá llegar a sus propias conclusiones”.
Respecto a ser uno de los mexicanos consentidos de Cannes –con tres galardones por sus filmes “Después de Lucía”, “Chronic: el último paciente” (2015) y “Las hijas de Abril” (2017)- Franco revela que su participación en el prestigiado festival ha sido su verdadera plataforma para brillar en la industria mexicana.
“Los premios que he ganado ahí me han ayudado mucho a confiar en mi instinto, a trabajar con más fuerza, a superar las adversidades que siempre están presentes”.
Abierto al diálogo
Aunque Michel Franco destaca la claridad con la que plantea la idea de sus historias desde un principio, el también realizador de “Después de Lucía” asegura que intercambiar puntos de vista con su elenco para determinar el rumbo de los personajes, ha sido fundamental para hacer de sus películas proyectos más entendibles y con mayor realismo emocional.
“Escucho mucho a los actores, en ese sentido la historia sí se va modificando. Si yo tenía algo en mente más específico y los actores proponen algo más interesante, lo acepto e incorporo al guion. Siempre me es importante hacer mancuerna con los actores”.
Michel Franco recalca que pese a que el drama es el principal condimento de “Las hijas de Abril”, la trama que fue filmada en Puerto Vallarta no ofrece una historia predecible que encamine al público a un final feliz común.
“Este película sorprende mucho y da muchos giros, no se parece a ninguna película que el público haya visto. Tiene una perspectiva totalmente diferente, no está hecha con fórmulas, vale la pena que la vea el público para sorprenderse”.
TOMA NOTA
Apunta a la comedia
Pese a estar enfocado en la promoción de “Las hijas de Abril”, Michel Franco revela que seguirá trabajando en finalizar el programa de comedia: “El que se enoja pierde”, que realiza junto a Gabriel Ripstein (“600 millas”) y Jorge Hernández Aldana. El proyecto será protagonizada por Pedro Damián y Eugenio Derbez (en los dos primeros capítulos).
“Creo que podrá salir al aire a principios del próximo año. Creo que podría ser por Televisa, pero no estoy seguro”, concluyó.
Sin miedo a los números
Sobre el recibimiento que “Las hijas de Abril” tendrán en la cartelera mexicana, el cineasta puntualiza que sus anteriores filmes han tenido buena respuesta en taquilla; por ejemplo, “Después de Lucía” (2012) logró en su segunda semana de exhibición 343 mil 468 boletos vendidos, captando entonces una ganancia de cinco millones 96 mil 813 pesos en su primera quincena, de acuerdo con la Cámara Nacional de la Industria Cinematográfica y (Canacine).
“He tenido suerte de que mis películas han gustado a mucho público, han sido taquilleras y creo que ‘Las hijas de Abril’ no será la excepción. Los premios me han ayudado a llamar la atención, que el público se sienta orgulloso y abrace mis películas que son completamente mexicanas”.
(Con información de El Informador)
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