Diversificar servicios, oportunidad para las librerías independientes

Notimex. Aunque abrir una librería independiente sigue siendo un camino lleno de obstáculos, sus dueños, quienes se declaran amantes de promover las letras, han encontrado en la diversificación de sus espacios, una forma de sobrevivir en el medio.

Así lo expresaron en el marco del Encuentro de libreros ALMAC. Retos y desafíos de las librerías en México, que se desarrolló en el marco de la 37 Feria Internacional del Libro Infantil y Juevenil (FILIJ), para compartir que experiencias. En el Museo Nacional de Antropología, Itzia Pintado, de la librería Icaria, y Juan Carlos Narváez, de la cafebrería Marabunta, abordaron con los asistentes aspectos relacionados con sus negocios literarios y la manera en que se han mantenido siendo proyectos con pocos años de existencia.

Ubicada en la calle Pitágoras, número 446, Icaria se encuentra en la planta baja de una escuela de escritores que ofrece cursos sobre ciencia ficción, literatura fantástica y cuento.

De hecho, algunos de los alumnos han tenido la oportunidad de presentar sus textos en esta librería que también ofrece servicio de cafetería, en un ambiente acogedor, como si se tratara de la casa de un aficionado a los libros. Pintado, quien es guionista audiovisual, destacó que además de literatura, se pueden encontrar ejemplares especializados en cultura, estudios de género y diversas disciplinas artísticas, ya que el proyecto de la librería con dos años de existencia, se encamina a vincularse con la comunidad sin perder su identidad.

En el caso de la Marabunta, ubicada en Av. Miguel Ángel de Quevedo 485, el sociólogo Juan Carlos Narváez, quien desde 2014 es socio fundador de la cafebrería, señaló que este espacio surgió de manera intuitiva ya que no contaban con experiencia como libreros o baristas. “Creemos que el mercado editorial es difícil, pero tratamos de conjuntar el espacio de la librería y el café y tratar que este espacio cultural y de resistencia, sobreviva a partir del trabajo con autores y editoriales independientes”, mencionó.

Actualmente, dijo, Marabunta se va posicionando como un espacio para las editoriales de ciencias sociales que no precisamente están ligadas a la academia y se busca generar una programación de presentaciones editoriales, lecturas de poesía y cuento, además de dar lugar a nuevos escritores.