México impulsa estrategia para enfrentar retos en materia de agua

Ntx. La desigual disponibilidad del agua en el país, la dinámica poblacional, el desarrollo de actividades económicas, los asentamientos urbanos desordenados, la degradación de las cuencas, la sobreexplotación de los acuíferos y los efectos de las sequías e inundaciones, son el principal reto del sector hídrico en México.

Por ello ante la rápida urbanización y la demanda creciente del líquido para las ciudades, el gobierno mexicano ha respondido con proyectos para garantizar el abasto y saneamiento en las mismas con el doble objetivo de rescatar la sustentabilidad de los recursos naturales y la sostenibilidad del crecimiento económico.

La Agenda del Agua 2030, publicada por la Comisión Nacional del Agua (Conagua), tiene una estrategia de largo plazo, cuyos avances se revisan cada año y sus resultados e impactos habrán de ser valorados cada seis años como base para su correspondiente actualización, a modo de dotar al sistema nacional de gestión del agua de una adecuada orientación estratégica de largo plazo.

Además, es un instrumento para la consolidación de una política de sustentabilidad hídrica que define la naturaleza y magnitud de los desafíos a superar y de las soluciones a desplegar para poder entregar a la siguiente generación un país con más fortalezas y oportunidades que las que existen en la actualidad.

Plantea hacer realidad un país con ríos limpios, cuencas y acuíferos en equilibrio, cobertura universal de agua potable y alcantarillado, y asentamientos seguros frente a inundaciones catastróficas y define la brecha existente entre tal visión y la realidad actual, así como prioriza las líneas de acción que es necesario desplegar para tal efecto.

El documento contiene la visión, resultado del análisis prospectivo desagregado por regiones; los principios y líneas estratégicas necesarias para alcanzar objetivos de largo plazo; y la identificación de los cambios necesarios en el arreglo institucional para hacer viables los componentes de la perspectiva.

También establece las modificaciones necesarias en el entorno institucional para dar viabilidad a cada uno de sus componentes como la organización, planeación, legislación, reglamentación, financiamiento, educación, capacitación y otros de similar naturaleza.

La Agenda del Agua 2030 es además un instrumento que alienta una conducta solidaria entre los mexicanos de las diversas regiones y localidades del país en el momento presente y de la generación actual respecto de las futuras.

Un factor determinante para hacer realidad la visión de la agenda es asegurar en los próximos años la continuidad y la disponibilidad de la asignación y aplicación de los recursos económicos requeridos.

Para superar el desafío de heredar ríos limpios, cuencas en equilibrio, cobertura universal y asentamientos seguros frente a inundaciones catastróficas, la agenda propone una estrategia general que se expresa en diversos lineamientos tales como asegurar que todas las cuencas del país cuenten con una estructura de gobierno sólida, con capacidad para gestionar los recursos hídricos de forma corresponsable y sustentable.

Además, asegurar una mejor y más equilibrada distribución de competencias de fomento, regulación y prestación de los servicios de agua y saneamiento, con responsabilidades en los tres órdenes de gobierno, para lograr un Sistema Nacional de Gestión del Agua más equilibrado, capaz de responder a los desafíos presentes y futuros del agua.

Dentro de los objetivos de la Agenda del Desarrollo Sostenible, en su apartado de Agua Limpia y Saneamiento, destaca que a 2030 se prevé lograr el acceso universal y equitativo al agua potable a un precio asequible para todos, así como a servicios de saneamiento e higiene adecuados y equitativos para todos y poner fin a la defecación al aire libre.

También mejorar la calidad del agua reduciendo la contaminación, eliminando el vertimiento y minimizando la emisión de productos químicos y materiales peligrosos, reduciendo a la mitad el porcentaje de aguas residuales sin tratar y aumentando de manera considerable el reciclado y la reutilización sin riesgos a nivel mundial.

Otros propósitos son aumentar el uso eficiente de los recursos hídricos en todos los sectores y garantizar la sostenibilidad de la extracción y el abastecimiento de agua dulce para hacer frente a la escasez y reducir el número de personas que sufren falta del líquido.

Implementar la gestión integrada de los recursos hídricos a todos los niveles, incluso mediante la cooperación transfronteriza, según proceda y de aquí a 2020, proteger y restablecer los ecosistemas relacionados con el agua, incluidos bosques, montañas, humedales, ríos, acuíferos y lagos, son otros objetivos.

El documento agrega que se prevé a 2030 ampliar la cooperación internacional y el apoyo prestado a los países en desarrollo para la creación de capacidad en actividades y programas relativos al agua y el saneamiento, como los de captación de agua, desalinización y uso eficiente de los recursos hídricos.

Además, tratamiento de aguas residuales, reciclado y tecnologías de reutilización y apoyar y fortalecer la participación de las comunidades locales en la mejora de la gestión del agua y el saneamiento.

En el Día Internacional del Agua, que se conmemora el 22 de marzo, se tiene la oportunidad de aprender más sobre el agua y los problemas relacionados con su carencia. Aunado a las medidas gubernamentales se podría reducir el consumo de agua con acciones sencillas en los hogares.

De esta forma no sólo se ahorrará agua, energía y dinero, sino que además se contribuye al bienestar de la humanidad y a un desarrollo sostenible.

El agua es un bien público y su beneficio debe ser distribuido de manera equitativa entre todos los habitantes, por lo que los pueblos y gobiernos tienen que trabajar juntos para ayudar a preservar el líquido y su mejor aprovechamiento debe realizarse todos los días del año.

Como un medio de llamar la atención sobre la importancia del agua dulce y la defensa de la gestión sostenible de sus recursos, cada 22 de marzo se celebra el Día Mundial del Agua, cuyo lema de este año es: Soluciones para el agua basadas en la naturaleza.