El arte de saber vivir.- En China, hace dos años, un ciudadano de cuarenta años fue diagnosticado con cáncer en sus ojos tras un deterioro progresivo de su visión. El hombre, a quien poco a poco sus ojos se tornaron de color rojo, desconocía los motivos de sus malestares por lo que visitó al médico. La noticia recorrió el mundo debido al parte clínico que le fue entregado: cáncer ocular por el uso prolongado del celular en la oscuridad.
Terrible noticia, en vista de que es una práctica muy común entre los usuarios de teléfonos móviles previo a la hora del sueño. Aunque, varias fuentes afirman que la historia del paciente, así como un diagnóstico de este tipo, es completamente falso. Incluso, otros alegan que es completamente real y que las precauciones deben aplicarse inmediatamente en el público. En este artículo revelaremos bajo estudios científicos, qué tan real puede llegar a padecerse cáncer por el uso del celular.
El Departamento de Salud de los Estados Unidos, bajo su Programa Toxicológico Nacional, prendió las alarmas. Investigadores de la Organización expusieron durante dos años a ratones a emisiones de radiación proporcionales a las que se expone un humano diariamente. Los rayos, imposibles de percibir ante el ojo humano, incrementan irreparablemente las posibilidades de desarrollar varios tipos de cáncer. Acciones que las personas, equivocadamente, no contemplan y desencadenan en el daño a su salud a corto, mediano y largo plazo.
En este estudio se comprobó que el 3 % de los ratones expuestos al experimento desarrollaron tumores malignos en su cerebro. Además, un 6 % más de ratones expuestos contrajeron tumores en su corazón y vías arterias. Por otra parte y, apoyando los hechos, el Centro Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer ratifica los diagnósticos. Esta entidad, perteneciente a la Organización mundial de la Salud, establece que la radiación de los celulares son “probables factores cancerígenos”.
Por otra parte y, apoyando la teoría, el Instituto de Salud Global de Barcelona develó un estudio que ratifica los posibles peligros del uso de las pantallas. Este proyecto contó con la participación de 4000 personas entre 20 y 85 años residentes en varias regiones de España. Cabe aclarar que, “la luz azul” es la que emiten las luces led desde las pantallas de teléfonos móviles y tabletas. Por lo tanto, los participantes expuestos a niveles más altos de luz azul tuvieron casi dos veces más riesgo de contraer cáncer de mama y próstata.
En conclusión, debes controlar tu exposición a teléfonos móviles previo a dormir, para prevenir posibles riesgos. Asimismo, toma nota de las siguientes recomendaciones porque, “prevenir es mejor que lamentar”. Limita el acceso al celular, al menos hasta una hora antes de dormir, sobre todo si tienes menos de veinte años. Además, si son tus hijos y, de corta edad, restringe el acceso para evitar aceleraciones de las funciones cerebrales. También, usa el dispositivo habiendo modificado la intensidad de la luz al más bajo nivel. Además, si usas gafas de protección visual o para leer o usar durante la lectura, no olvides llevarlos puestos durante el uso de estos aparatos electrónicos.
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