Vigente el legado coreográfico del célebre Marius Petipa

Notimex. Las obras del reconocido bailarín y coreógrafo francés Marius Petipa, de quien mañana se cumplen 102 años de su fallecimiento, son las más interpretadas y famosas en la actualidad.

En este país la Compañía Nacional de Danza ha incluido en su repertorio las piezas “Don Quijote”, “El lago de los cisnes” y “La bella durmiente”, sobre está última se sabe la compuso Petipa en la última parte del siglo XIX, cuando formó parte del Ballet del Teatro Imperial Ruso.

Marius Petipa nació en la provincia de Marsella, Francia, el 11 de marzo de 1818, en el seno de una familia de bailarines; su hermano Lucien y su padre Jean lo instruyeron en el arte de la danza, según el portal en línea “El poder de la palabra”.

En París y Burdeos, comenzó su carrera como primer bailarín, y con su padre realizó giras por Estados Unidos y más tarde bailó e hizo coreografías en Madrid, España, donde también aprendió sobre la danza española. En esa época, ejecutó varias coreografías con la bailarina austriaca Fanny Elssler.

Arribó en 1847 a la ciudad rusa de San Petersburgo, como primer bailarín del ballet del Teatro Imperial, donde estrenó la primera coreografía realizada por él ocho años después.

Con el éxito de su coreografía “La hija del faraón”, la cual se caracteriza por la espectacularidad y la grandeza de sus elementos, cualidades por las que ascendió a primer maestro del ballet.

Petipa, se convirtió en el creador más importante de la escuela rusa de ballet, a través de la escenificación de coreografías en las que incluyó y cuidó cada detalle de la música, la decoración y el argumento en las obras. Por ello, en su trabajo artístico colaboró y se coordinó con compositores, libretistas y diseñadores.

Un ejemplo, es la obra de “El cascanueces” cuya producción y montaje planeó con el compositor ruso Piotr Ilich Chaikovsky (1840-1893), en 1892. Sin embargo, Petipa enfermó y la coreografía la tuvo que terminar su asistente el también coreógrafo Lev Ivanov (1834-1901).

La obra coreográfica de Petipa asciende a 46 ballets originales, los cuales creó en Rusia, de acuerdo con la Revista Digital Danza Ballet.

Sus obras se basan en cuentos y leyendas de la mitología rusa, romana y griega, como las historias de hadas, fantasía y el folclor de diversos países.

Entre las obras de Petipa destacan, “Don Quijote”, de 1869, “La bayadera”, de 1877 y “Raymonda”, durante 1898 con música de Chaikosvky.

Así como los famosos ballets “La bella durmiente”, “El lago de los cisnes” y escenas del segundo acto de “Giselle”.

Según datos biográficos de “www.biografiasyvidas.com” , en 1904 se retiró de los escenarios por completo y dos años más tarde, publicó sus memorias.

A los 92 años, Marius Petipa murió en la ciudad de Gurzuf, en Crimea, Rusia.