Es con arte y no con sangre, como entra la letra: Jenny Sotomayor

Notimex.- Contrariamente al dicho que comúnmente conocemos en el sentido de que la letra con sangre entra, en realidad entra con arte, manifestó Jenny Sotomayor, quien recién publicó su primer libro del Método Misolar para la Lecto-escritura, de Producciones Educación Aplicada.
“La letra con sangre entra”, que consta de tres volúmenes, vio la luz ya con su primer tomo y estará concluido en lo que resta del año. Va dirigido a niños de preprimaria y primaria.

En entrevista con Notimex, Jenny, quien es maestra de música desde hace 30 años, dijo que la obra rompe ese paradigma y demuestra que vale la pena incursionar en las nuevas corrientes educativas que señalan que el arte no es una materia recreativa más.

Puede servir para el pensamiento matemático, en la trigonometría, la arquitectura, la exploración del mundo social y es capaz de crear nuevas conexiones cerebrales que ayudan a cualquier otra área.

“En el pasado, el IQ se medía solamente por la memorización verbal lingüística y las matemáticas. Ahora, gracias a los pedagogos que han abierto los caminos, sabemos que un niño puede ser mucho más auditivo que visual, y otro puede ser más kinestésico.

“En la obra, abundó, buscamos usar las inteligencias musical, visoespacial y la kinestética, que es la de los grandes bailarines. Es utilizar las artes para profundizar en cualquier área que necesiten los niños”, subrayó.

Entre canciones, dibujos, mandalas y propuestas para colorear, los niños aprenden. Y todo tiene y un por qué. Por ejemplo, la autora explica que los mandalas son dibujos centrados que ayudan al niño a relajarse. “Son una especie de meditación y después están listos y concentrados para cualquier cosa”.

El primer tomo ofrece canciones para cada vocal y también para la caligrafía. El contenido incluye, además de la presentación y las referencias bibliográficas, 13 canciones, de un total de 48 en los tres tomos.

Se trata de la mariposa y el caracol; Los gatos en el tejado; Las gotitas de lluvia; Indio Para Veloz; Insectos; Uvas de un marinero; El unicornio; Ernesto “El Elefante”; Erizo; Olga “La Oruga”; Las orcas; La Abuela, y Astronauta.

Cada canción tiene letra para cantar y bailar. Luego, sólo las pistas para dibujar los mandalas o hacer dibujos libres, preguntas para reflexionar sobre los valores. “Hay muchas, muchas, actividades para padres y maestros”.

En las canciones lo mismo se escucha el ritmo de rock que de cha-cha-cha. “No estoy peleada con ningún género”.