“El Fisgón” destaca la formación de José Guadalupe Posada

Notimex.- El monero mexicano Rafael Barajas, mejor conocido como “El Fisgón”, aseguró anoche que la formación del grabador José Guadalupe Posada vino de los talleres, toda vez que en su época “era difícil acceder a las universidades”.

Durante la presentación del catálogo “José Guadalupe Posada: Transmisor” en el Museo Nacional de Arte (Munal), el también curador dijo que durante muchos años los talleres eran una zona de aprendizaje importante, mientras que a las universidades sólo asistía la clase noble.

Bajo ese tenor, expuso que Posada comenzó hacer caricatura a la edad de 19 años, gracias a esa formación temprana de joven artesano, en un taller de gente muy esforzada.

Asimismo, se dijo convencido de que la formación de Posada se hizo en los talleres de José María Chávez y Trinidad Pedroza.

“Cuando Posada fallece hay una historia curiosa, nadie pelo su muerte, sino hasta 10 años después, cuando alguien escribió un texto sobre Vanegas Arroyo y de pasada mencionó a Posada; en él se dice que a Trinidad y Pedroza le costó trabajo hacerse de un equipo que lo entendiera”, refirió.

Durante su intervención, “El Fisgón” habló, además, de los inicios de Posada, al tiempo que hizo un breve repaso sobre su vida, considerando que se trata de una figura que no se ha terminado de estudiar y de un fenómeno de estudio fantástico.

Comentó que últimamente ha habido una especie de regreso a las fuentes, por lo que su trabajo ha vuelto a figurar en las carpetas de investigadores.

Lo recordó como un artista modesto y agregó que el propio Posada se consideraba un artesano más que otra cosa.

De acuerdo con el caricaturista, él no aspiraba a las grandes glorias y acabó siendo un ícono nacional, sus calaveras son ya parte de la naturaleza de los mexicanos; “es un artista que ya tenemos en la piel”, destacó.

Aseguró que el mito de Posada creció tras su muerte, al punto de lo que convirtieron en uno de los precursores de la Revolución Mexicana, cosa que nunca fue, “si se revisa su trabajo periodístico, vemos que fue porfirista toda su vida; cuando Porfirio perdió, Posada estuvo con él”.

“Tras su muerte lo reinterpretaron y yo lo dude, pero los señores que lo revaloraron tuvieron un gran tino, un gran acierto. Estos señores reivindicaron en Posada al pueblo pobre que había hecho la Revolución Mexicana e hicieron de él un artesano proletario y precursor de la Revolución.

“Posada no era ese artesano proletario revolucionario, pero sí realizó la crónica del pueblo pobre que hizo la Revolución. Entonces, eso es lo que rescataron los señores que revisan la vida de 1920”, puntualizó.

Respecto al catálogo, publicado a propósito de la exposición homónima que conmemora el 100 aniversario luctuoso del artista, vale mencionar que incluye una serie de ensayos sobre los trabajos creativos de Posada, desde diversas perspectivas, entre ellas la publicidad, estampa religiosa, caricatura política y humorismo gráfico.

Por otro lado, la muestra reúne más de 160 obras de la producción visual de Posada, a través de un diálogo temático y estético con otras piezas de artistas posteriores.